Se acentúa desaceleración de economía, admite Banxico
MÉXICO, D.F. (apro).- El Banco de México (Banxico) reconoció que la economía mexicana se desaceleró “de manera importante” durante el segundo trimestre del año, derivado de la debilidad del gasto interno y el rezago en las exportaciones.
Al dar a conocer el Anuncio de política monetaria, en la que se consideró inamovible la tasa de interés a un día, ubicada en 4%, el organismo encabezado por Agustín Carstens señaló:
“La información más oportuna acerca de la economía mexicana sugiere que la desaceleración que se ha venido registrando desde la segunda mitad de 2012 se acentuó de manera importante en el segundo trimestre de 2013, como reflejo de una considerable desaceleración de las exportaciones y de la debilidad en el gasto interno”.
El banco central explicó que lo anterior ha dado lugar a que diversos indicadores ampliaran su rango.
“Ante la expectativa de los cambios en la política monetaria de Estados Unidos, el peso se depreció y las tasas de interés, en particular las de largo plazo, aumentaron considerablemente”.
En efecto, en mayo pasado, las exportaciones cayeron 0.9% ante la debilidad de los mercados internacionales, principalmente, de Estados Unidos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Mientras que el tipo de cambio se vio afectado por el anuncio de la Reserva Federal respecto de la baja de compra de activos en los mercados financieros, lo que devaluó el peso.
El Banxico también advirtió que ambos ajustes se dieron de manera ordenada y no han afectado las expectativas de inflación ni la prima por riesgo inflacionario.
“Se espera que el ritmo de actividad económica aumente en la siguiente mitad del año. No obstante, a la luz de la rapidez y profundidad con la que se ha dado la desaceleración de la economía, los riesgos a la baja para la actividad económica en México se han elevado”, pronosticó la institución.
Por el lado del aumento de precios, que en junio se ubicó en 4.09% anual, el Banco de México precisó que a partir de mayo la inflación general anual comenzó a disminuir, lo que se intensificó en junio, tal como se había previsto.
“Ello obedece, fundamentalmente, a la evolución de la inflación no subyacente anual, la cual después de alcanzar en la primera quincena de mayo su registro más elevado en casi una década, se redujo fundamentalmente como resultado del desvanecimiento de parte de los efectos de los choques transitorios que propiciaron su aumento”.
El organismo adelantó que el nivel del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) logre ajustarse al rango del 3% (+/- un punto porcentual) en los siguientes meses.
En el sector externo, el Banxico acotó que la economía mundial ha seguido desacelerándose, como se ve en el menor dinamismo del comercio internacional y, en consecuencia, de la producción industrial de numerosos países.
En Estados Unidos, los pronósticos de crecimiento económico para el año se han continuado revisando a la baja, a pesar de que ha sido notoria una mayor creación de empleos en meses recientes.
En la zona del euro, la actividad económica sigue mostrando señales de debilidad en respuesta al proceso de desendeudamiento de los sectores público y privado, a la persistente fragilidad del sistema financiero y a un lento avance en la agenda estructural.
Por su parte, el crecimiento de las economías emergentes se ha desacelerado más de lo previsto, en particular en Asia, como resultado de un menor dinamismo de la demanda interna y del comercio mundial.
“En balance, prevalecen riesgos a la baja para el crecimiento económico mundial. En este contexto, y aunado a menores precios de las materias primas, se anticipa un panorama de inflación mundial baja”, concluyó.