MÉXICO, D.F., (apro).- Los operativos de fiscalización que lleva a cabo la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) contra prácticas abusivas y publicidad engañosa llegaron este jueves a la Central de Abasto, donde inspectores de ese organismo clausuraron seis negocios por no exhibir los precios de sus productos e inmovilizaron 14 básculas de nueve comercios por ‘comerse” de 25 hasta 750 gramos de más o no cumplir con la calibración obligatoria. En el primer caso, la institución encabezada por Alfredo Castillo suspendió los siguientes establecimientos: Casa Arellano, Abarrotes La Tapatía, Comercializadora Rosy, Comercializadora Olinka, Abarrotes el Tanhuatense y un expendio de frutas y legumbres sin nombre. La tienda mayorista Zorro Abarrotero se negó a dar facilidades para llevar a cabo la verificación. En la revisión, los inspectores de la Profeca checo giros comerciales de abarrotes, frutas, legumbres, dulcerías, chiles secos y semillas, pollerías, cremerías y carnicerías, así como básculas de pesaje para más de cinco toneladas. Fue así como inmovilizó 14 básculas en nueve comercios por registrar faltante de peso desde 25 hasta 750 gramos o no cumplir con la calibración anual obligatoria. De un total de 60 básculas inspeccionadas por la autoridad, los negocios donde estos aparatos no registraban el peso exacto de las mercancías fueron los siguientes: Frutas Casa Farías, Frutas y Verduras sin nombre, La Hidalguense, Dulcería y Abarrotes El Palmar, Lucky Raisins, Casa Basave, Frutas y Legumbres Ernesto, Unión Aquiles Serdán y Distribuidora Jacky. La Profeco instaló dos módulos con básculas de referencia para los consumidores, conocidos ya como “Báscula del Consumidor”, atendiendo a 50 personas mediante acciones de repeso de producto. A principios de semana la Profeco firmó un convenio con las autoridades de la Central de Abasto para garantizar la calibración correcta de todas las básculas ubicadas en este centro de distribución mayorista.