MÉXICO, D.F. (apro).- Si bien, el gobierno de Enrique Peña Nieto hace alarde sobre la eliminación de trabas para la Inversión Extranjera Directa (IED), hasta junio pasado, estos flujos sumaron 9 mil 732 millones de dólares, cuando en el 2013 ascendieron a una cifra récord de 39 mil 171 millones, de acuerdo con el Segundo Informe de Gobierno. Lo peor es que la mayor parte de la IED provino de la reinversión de utilidades (8 mil 570 millones) y de las cuentas entre compañías (2 mil 177 millones); mientras que las nuevas inversiones tuvieron una caída de 956 millones de dólares. Según los datos disponibles, desde 1994 las nuevas inversiones no registraban caídas, como lo hicieron en los primeros seis meses de este año. De hecho, el año pasado fueron las que impulsaron al total de la IED, con un total de 19 mil 457 millones de dólares, en gran medida por la adquisición de Grupo Modelo por parte de la cervecera belga Anheuser-Busch Inbev, cifrada en 13 mil 249 millones de dólares. Los flujos totales de IED en los primeros seis meses significaron apenas una cuarta parte de los que ingresaron al país en el 2013 y se espera que al final del 2014 la IED sume unos 24 mil millones de dólares. El total de la IED en el primer semestre del año provino de España (26.1%), Países Bajos (20.1%); Bélgica (13%); Estados Unidos (10.3%) y Japón (7.2%). Mientras que los principales sectores receptores de IED fueron las manufacturas, servicios financieros, comercio y minería. Si bien en el 2013 México se convirtió en el décimo receptor de estas divisas a nivel mundial y fue el principal impulsor de estos recursos en América Latina, para este año no se espera gran cosa. Terreno limpio para inversionistas extranjeros Eso sí, el gobierno de Peña Nieto celebró en su Segundo Informe la eliminación de barreras a la inversión extranjera directa en materia energética, financiera, de telecomunicaciones y radiodifusión. De entrada, en materia de energía “se permitirá llevar a cabo actividades de exploración y extracción del petróleo, y demás hidrocarburos, mediante asignaciones a empresas productivas del Estado o a través de contratos con éstas o con particulares”. En materia financiera destacó la participación de hasta 100% de inversión extranjera en instituciones de seguros y fianzas, casas de cambio, almacenes generales de depósito, administradoras de fondos para el retiro, sociedades de información crediticia, instituciones calificadoras de valores y agentes de seguros. Mientras, se amplía el criterio establecido para la aplicación del artículo 17 de la Ley de Inversión Extranjera, relativo al establecimiento de personas morales extranjeras en México, la cual agiliza su establecimiento en el país y favorece las condiciones para iniciar negocios. Eso no es todo. En materia de telecomunicaciones y radiodifusión se permite la libre participación de la IED en telecomunicaciones y comunicación vía satélite; y hasta 49% en radiodifusión sujeto a la reciprocidad que exista en el país en el que se encuentre constituido el inversionista o el agente económico que controle en última instancia a éste, directa o indirectamente. La mala noticia para el país es que la IED aporta alrededor del 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que la inversión nacional privada y pública aportan más de 16%... De acuerdo con el especialista en Economía, José Luis de la Cruz, la parte más importante para generar crecimiento es la inversión nacional pública y privada. En entrevista con Apro explicó que “(la inversión) pública que va a la infraestructura, CFE, Pemex, carreteras y la privada que va a desarrollar pequeña, mediana y grande empresa, va a donde no va la inversión de gobierno. La inversión de gobierno no abre restaurantes, no abre empresas siderúrgicas. La comunidad entre inversión física y privada es el motor de crecimiento. La IED es una pequeña parte de la otra inversión”. Consulta el Segundo Informe aquí:

Segundo Informe de EPN by Revista Proceso