México, D F (apro)- Hay algunos académicos en México que ven el mundo exclusivamente desde la perspectiva norteamericana Creen que nuestro país no tiene margen de maniobra, que México está condenado a integrarse a Estados Unidos Suponen que el mundo se agota en Washington Son gringocéntricos
Ante la limitada visión que tienen, muy "norteados", habrá que reivindicar una vez más el carácter multirregional, como puente de diálogo entre el norte y el sur del continente, entre Europa y Asia
En particular, debemos reafirmar con América Latina nuestros vínculos vitales Tenemos una historia, lengua, cultura e identidad comunes, tal como lo sostuvimos en una propuesta al entonces candidato a la Presidencia de la República, Vicente Fox
La importancia y complejidad de la relación con nuestros vecinos de América del Norte no puede hacernos olvidar la identidad latinoamericana de México El manejo de la política exterior, y en particular de la política comercial de los últimos años, ha propiciado un alejamiento y la desconfianza de varios de nuestros hermanos latinoamericanos hacia México Ello es particularmente cierto en el caso de Brasil
La falta de coherencia ha caracterizado la política hacia Cuba, a partir de 1999 En el gobierno de Zedillo, primero se votó en contra de la resolución presentada ante la Comisión de Derechos Humanos que condenaba la violación de los derechos humanos en ese país, para después entrevistarse con la oposición y criticar al régimen cubano durante la Cumbre Iberoamericana de La Habana La incoherencia continuó en el actual gobierno de Fox Este año, la cancillería se abstuvo en Ginebra, al igual que lo hacía el régimen priista, de condenar al régimen cubano por las violaciones a los derechos humanos, a pesar de enarbolar este nuevo principio de política exterior Es conveniente apoyar la apertura y la democratización de Cuba, así como la defensa de los derechos humanos, al mismo tiempo que no puede dejar de condenarse el embargo estadunidense y la existencia de legislación violatoria del derecho internacional, como la Ley Helms-Burton En el marco del necesario proceso de transición democrática en la isla, es indispensable mantener una firme presencia mexicana en Cuba a través de la cultura, del fomento al diálogo entre intelectuales de todos los signos, de la industria editorial y las empresas mexicanas
Las relaciones con Centroamérica son ahora más estrechas que antes, pero aún no se aprovechan todas las oportunidades de diálogo y complementación que una Centroamérica en paz y democrática ofrece
En particular con nuestros vecinos del sur, Belice y Guatemala, conviene impulsar el establecimiento de polos de desarrollo y una mayor integración de nuestras economías Se deben respetar los derechos de los trabajadores centroamericanos en México, independientemente de su calidad migratoria No podemos exigir el respeto a los derechos de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos y violar los derechos de los centroamericanos en el territorio nacional
Al igual que en el caso de la frontera norte, la protección del medio ambiente debe ser una prioridad en la relación con nuestros vecinos del sur Se pueden ampliar y fortalecer las áreas naturales regionales protegidas
Se prevé que en el año 2005 estarán por concluir las negociaciones del Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) La última etapa de dicha negociación se llevará a cabo en México Nuestro país debe enviar señales claras de que apoya el establecimiento del ALCA y que está dispuesto a considerar en la negociación las cuestiones laborales, medioambientales y de consulta a la sociedad civil, mientras éstas no sean pretextos proteccionistas
La relación con Brasil requiere de un replanteamiento El diálogo y la cooperación entre nuestros países es indispensable para una América Latina fuerte Nuestros proyectos de nación, nuestro desarrollo, no implica la exclusión del otro En la integración de América Latina, en la promoción de una nueva era de cooperación cultural y educativa que comprenda a las industrias culturales, las dos grandes locomotoras pueden ser México y Brasil, sin afanes de liderazgo mesiánico ni imposiciones hacia los otros países de la región La hegemonía de un país en América Latina no tiene lugar ni futuro
Por ello, es necesario reiterar la identidad latinoamericana de México, recobrar el espíritu de una verdadera comunidad latinoamericana Subrayar en el discurso y en la práctica que nuestro país es la nación hispano-parlante más grande del mundo, asumir los compromisos que de ello se derivan y contribuir a una mayor presencia de América Latina como región en las principales negociaciones internacionales utilizando mecanismos de consulta ya existentes y eficaces como el Grupo de Río
Aunque crean lo contrario, México es y será latinoamericano