MÉXICO, D.F., 1 de junio (apro).- El Banco de El Vaticano, cuyo nombre formal es Instituto para las Obras Religiosas (IOR), es investigado por la justicia italiana por presunto lavado de dinero ilícito, informó hoy el diario italiano La Repubblica.

De acuerdo con el periódico, “se indaga acerca de la posibilidad de que personas con residencia fiscal en Italia utilicen el IOR para esconder delitos como fraude y evasión fiscal”.

Según algunos fiscales citados por el diario, “se trata de cuentas sospechosas” depositadas en ese banco, por lo que podrían solicitar una petición internacional para que se identifique a las personas e instituciones beneficiadas con esas operaciones, y si a través de ellas se introdujo dinero ilícito a Italia.

La Repubblica señala que, a partir de 2004, cerca de 180 millones de euros fueron manejados por el banco, sin que se haya dado la identidad de los autores de las transacciones, como lo exige la ley italiana.

En el caso, agrega, están involucrados otros 10 bancos italianos, entre ellos los poderosos Unicredit e Intesa San Paolo.

El Banco de El Vaticano administra las cuentas de varias congregaciones religiosas, así como de asociaciones católicas. Es una institución eclesiástica cuya sede se encuentra en la propia ciudad del Vaticano, pero se beneficia de la extraterritorialidad y no se rige por las normas financiares italianas.

Hace menos de un año fue designado presidente del banco Ettore Gotti Tedeschi, quien fue representante en Italia del grupo bancario Santander.

Ya anteriormente, en los ochenta, el Banco de El Vaticano estuvo implicado en el escándalo político-financiero que provocó la quiebra del Banco Ambrosiano, del que la Santa Sede también era accionista importante.

En su libro Vaticano Spa, el escritor italiano Gianluigi Nuzzi menciona que el Banco de El Vaticano puede estar implicado en cuentas millonarias de fundaciones fantasma, transferencias de dinero sin control y vínculos con capos de la mafia italiana.