Madrid, (proceso.com.mx).- El exjuez Baltasar Garzón declinó hoy hacerse cargo de la defensa de Edward Snowden, el exconsultor de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) que destapó el programa de vigilancia electrónica de Estados Unidos. “Informo que el despacho de abogados ILOCAD ha decidido no asumir la defensa de los intereses del Sr. Snowden”, afirmó en un comunicado emitido hoy aquí por el exjuez de la Audiencia Nacional española. Sin ofrecer mayores detalles, Garzón señaló que el lunes de esta semana recibió una petición de parte de Snowden para que se encargase de su defensa, caso que estudió antes de pronunciarse hoy. No obstante, Garzón sostiene que sí continuará con la defensa de Julian Assange y de la organización Wikileaks. “Por otro lado, continuaremos con la representación del Sr. Assange y de Wikileaks en la defensa del derecho fundamental a la libertad de información y de expresión”, cita el comunicado. Durante su desempeño como juez de la Audiencia Nacional, Garzón se convirtió en una figura de índole internacional al enjuiciar al dictador chileno Augusto Pinochet e impulsar diversos casos relacionados con violaciones a los derechos humanos y contra terroristas de Al Qaeda y de la banda armada ETA. Sin embargo, en febrero del 2012, Garzón fue inhabilitado de sus funciones jurisdiccionales al ser condenado a once años de inhabilitación por ordenar intervenciones ilegales el caso Gürtel, la mayor trama de corrupción política que afecta al gobernante Partido Popular (PP), formación de derecha española. En el caso de Snowden, quien según el líder ruso Vladimir Putin se encuentra en un área de tránsito en el aeropuerto Cheremetivo de Moscú, el domingo pasado Wikileaks dio a conocer que el exanalista de inteligencia les solicitó ayuda debido a la “experiencia para preservar su seguridad”. Este caso llevó a un punto de la más alta tensión diplomática las relaciones entre Estados Unidos, Rusia y China –primer país donde huyó el estadounidense—, por la petición del gobierno de Barack Obama para que le sea entregado Snowden para ser sometido a un juicio por espionaje. Snowden decidió no abordar el vuelo hacia La Habana, del cual había adquirido un boleto. Rusia refrendó su posición de que no habrá amenaza de Estados Unidos que los obligue a entregar a Snowden, cuyo asilo político es estudiado por el gobierno de Ecuador.