MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- La Policía danesa abatió esta madrugada al presunto autor de los dos tiroteos ocurridos el sábado en un centro cultural y en una sinagoga en Copenhague, en los cuales murieron dos personas incluyendo un miembro de la comunidad judía y cinco policías resultaron heridos. De acuerdo con Associated Press, funcionarios no identificaron al autor de las balaceras, pero dijeron que es posible que estuviese imitando los sucesos terroristas del mes pasado en París, cuando radicales islamistas perpetraron una masacre en la redacción del semanario satírico Charlie Hebdo y luego atacaron a judíos en un supermercado kosher. Según la hipótesis policial, basada en grabaciones de video, el individuo de rasgos árabes de entre 25 y 30 años abrió fuego contra un centro cultural donde se celebraba un debate sobre blasfemia y libertad de expresión, matando a una persona e hiriendo a tres policías. De allí se trasladó en un vehículo que fue encontrado a tres kilómetros del lugar y luego tomó un taxi para dirigirse al barrio de Nørrebro, al norte de la ciudad, donde fue abatido esta madrugada no sin antes protagonizar presuntamente un segundo tiroteo ante un sinagoga. El atacante fracasó en su intento de entrar al centro religioso, en el que se encontraban unas 80 personas, pero disparó contra el joven que controlaba el acceso de visitantes, provocando su muerte minutos después. La víctima de este segundo asalto era miembro de la comunidad judía. Otros dos agentes de policía resultaron heridos. Horas antes, poco después de las 6 de la tarde del sábado, se produjo el primer asalto en un centro cultural en donde se realizaba un debate sobre blasfemia y libertad de expresión. Una persona murió y tres policías resultaron heridos. En el lugar se encontraban en ese momento el embajador francés en Dinamarca y el artista sueco Lars Vilks, quien vive desde hace años bajo protección policial por las amenazas de grupos islámicos tras dibujar a Mahoma como un perro. Las autoridades danesas consideraron este incidente como un atentado terrorista y elevaron al máximo la alerta en la capital, con un despliegue masivo de efectivos policiales. “Dinamarca ha sido golpeada por el terrorismo”, dijo la primera ministra del país, Helle Thorning-Schmidt. “No conocemos el motivo de las acciones del presunto autor, pero sabemos que hay fuerzas que quieren hacer daño a Dinamarca. Quieren reprender nuestra libertad de expresión”.