Con ataúdes cubiertos con banderas iraquíes a cuestas, decenas de ciudadanos norteamericanos radicados en El Salvador, protestaron de nueva cuenta frente a la sede diplomática de su país en la capital de esa nación centroamericana “Queremos que se den cuenta de que no están representando a su país en esta guerra”, gritó Ambar Darilek, ciudadana americana de origen paquistaní, durante la manifestación La mujer de 30 años que cargaba a su pequeña Ayeshia Isabel, de seis meses cubría su rostro con una manta celeste, según dijo, para protestar por la matanza de civiles en Irak Junto con ella, varias decenas de ciudadanos norteamericanos, que residen en la capital salvadoreña, levantaban ataúdes cubiertos con la insignia de Irak frente al cerco de policías antimotines que resguardaba la seguridad de la sede diplomático estadunidense Había más de dos policías por cada manifestante –participaron 100 uniformados—que aislaron la zona aledaña para impedir el paso de los activistas antibélicos que pretendían llegar hasta la entrada principal de la legación americana, ubicada al suroeste de San Salvador Un delegado de la embajada atendió a los dirigentes de la tercera protesta que se efectúa en los alrededores de la sede diplomática desde que la semana pasada inició la guerra, pero sólo para escuchar sus demandas 27/03/03