San Luis Potosí, SLP , 16 de octubre (apro)- A pesar de grillas, celos artísticos por parte de los grupos locales, y la atención de los medios nacionales encima, el Festival Internacional de Danza Contemporánea "Lila López" sigue adelante con una programación única en el país Se destaca en primer lugar la brillante participación del grupo "Sankai Juku", de Ushio Amagatsu, grupo de danza de origen japonés que para muchos es el mejor de su género en el mundo Subsidiado por varias compañías comerciales japonesas, se presentó sólo en las ciudades de Guanajuato, Chihuahua y San Luis Potosí En segundo lugar habría que situar a la compañía francesa "Cave Canem", de Philippe Combes, que presentó un espectáculo multimedia sobre el mítico Minotauro, el laberinto y el hilo de oro de Ariadna Y si bien tuvieron algunos problemas técnicos, se destacó la intelectualidad cartesiana de los franceses Una vez más --y al revés de cómo suelen hacer otras compañías-- el concepto sobresalió por encima de la producción En la parte nacional hay que resaltar lo exitosa función del grupo "La Manga", que dirige Gabriela Medina, el solo de Antonio Salinas y la disciplina del grupo "Antares", de Adriana Castaños Para María González, directora del festival, su fuerza se sustenta en una selección rigurosa de quienes se presentan y la vanguardia de las propuestas artísticas que realizan Es decir, González selecciona obras más que compañías Con ello, se libra de las vacas sagradas con montajes ya muy desgastados y, por otro, permite que los jóvenes accedan a presentarse en espacios que solían ser casi institucionales Además, renunció a hacer cursos para principiantes y organizó talleres especializados para bailarines profesionales, que hasta el momento no existen en el país En su primer año como directora González apenas si logró interesar a la prensa local Ahora, televisión, radio y prensa escrita asistieron Una mujer intentó a gritos hacer un escándalo en una función y algunos de los grupos locales acusaron a González de haberlos excluido Esto empeoró con unas no muy afortunadas palabras de la maestra Guillermina Bravo, quien señaló que el Festival era "elitista y parecido al Cervantino" Surge entonces la pregunta de cómo se puede ser elitista cuando el precio de acceso a las funciones es de treinta pesos En otras latitudes, el boleto más barato para ver a Sankai Juku es de mil pesos y eso si se encuentra un boleto Por fortuna, más allá de la grilla que despierta el que un festival empiece a tomar gran fuerza a nivel nacional e internacional, lo importante es que salvo una o dos lamentables excepciones, el nivel artístico de los artistas presentados es incuestionable En cuanto a los grupos locales, algo debe de estar pasando en el proceso artístico de San Luis Potosí, porque ningún festival nacional los incluye en su programación Tal vez la opción debería ser la misma que tomó Monterrey: además de tener un festival de danza de altos vuelos se tiene otro metropolitano, donde los principales grupos de la ciudad bailan y todavía otro más para los aquellos que trabajan en espacios alternos Con ello se ganaría más espacio para la danza, habría más actividades y se lograría una mejor condición laboral para quienes viven de la danza en esta ciudad Todavía con platos fuertes por presentar como "Contempodanza", de Cecilia Lugo, y el ejercicio teatral "Fue en un Cabaret", de Tito Vasconcelos, el festival de San Luis, permanece a la cabeza de todos los festivales de danza del país; pero como viene sucediendo con los principales festivales artísticos del país, es de temerse que lo incorporen a la burocracia, y a la "popularidad" Al fin y al cabo ¿a quién rayos le interesa la danza contemporánea? La desinformación e ignorancia fue la constante del proyecto cultural del sexenio de Fox En una entrevista que le hice cuando era gobernador de Guanajuato le pregunté por qué no iba a los eventos del Cervantino Su respuesta lo definió de cuerpo entero: "Es que no me gusta desvelarme"