Desangelado comienzo
Bastante malo le salió el carburante de campaña a Felipe Calderón Pálida sombra de sà mismo, de sus pretensiones originales, el candidato presidencial del PAN empequeñece, se diluye entre desangelados actos proselitistas, destaca Proceso en su edición de este domingo 5 de febrero
Amargo ha sido también el inicio de su campaña, el primer minuto del jueves 19: El espectacular arranque con luces, sonido, papelitos de colores, estreno de promocionales, en su casa de campaña, contrastó con el desairado desayuno en Iztapalapa y el mitin en el Toreo de Cuatro Caminos, en Naucalpan
La intensa silbatina al dirigente estatal panista del Estado de México, Francisco Gárate, el tardÃo arribo de Manuel Espino y la huida de acarreados del coso arrojaron, a la semana siguiente, la frustración de un mitin en Ecatepec, una cancelación relevante y tan repentina como un encuentro con taxistas defeños
La primera gira de Calderón prometÃa intensidad: VÃa terrestre, fue al encuentro de enclaves panistas: Querétaro, San Luis PotosÃ, Aguascalientes y Jalisco, con cuyos gobernadores y obispos sostuvo discretas reuniones
Pero el diálogo con empresarios, colonos y prosélitos contrastó con enclenques mÃtines --cuyos asistentes contaron con transporte gratuito?y el afán persistente de posar para los fotógrafos, un signo distintivo de campaña hasta ahora
Tan frágil percibe su plataforma de despegue electoral que busca sustentarse nada menos que en la propaganda de Vicente Fox, es decir, colgarse de ese fracaso que se presenta como el México que "ya cambió", dice el reportaje que aparece este domingo 5 de febrero en Proceso