¿Y la pintura mexicana?

jueves, 14 de enero de 2010 · 01:00

MÉXICO, D.F., 14 de enero.- En el contexto global del arte contemporáneo del siglo XXI, la pintura se ha convertido en uno de los géneros creativos más interesantes. Lejos de haberse debilitado por el predominio que tuvieron los lenguajes conceptuales durante los últimos 15 años, las prácticas pictóricas no sólo innovaron sus vocabularios, sino que, además, se expandieron hacia otros géneros y dimensiones creativas.

Atentos a la seducción de la visualidad digital, a la agresividad de las poéticas suburbanas, a la fascinación de las imágenes científicas y a la riqueza de la herencia icónica de la historia del arte occidental, algunos artistas enfrentaron el sensacionalismo conceptual generando, desde los últimos años de la pasada década de los años ochenta, poéticas figurativas y abstractas que actualmente destacan por su innovación, audacia y pluralidad.

Entre los creadores de vocabularios figurativos, sobresalen por su particularidad y regionalidad los exponentes de la escuela de Leipzig. Encabezados por Neo Rauch (Leipzig, Alemania, 1960), apoyados por el mercado y ubicados en el entorno académico de la Escuela para Gráfica y Artes de Libro de Leipzig, estos artistas de poéticas realistas destacan no sólo por sus creaciones sino, también, por haber colocado a la ciudad alemana en el mapa actual del arte contemporáneo.

En lo que se refiere a los lenguajes abstractos, además de la pluralidad de poéticas que se han concretado en los últimos años –matéricas, simbólicas, expresionistas, geométricas, constructivas, cientificistas, cinematográficas, centradas en la captación del movimiento, atrevidas en la alteración del acto creativo y audaces en la utilización de todo tipo de soportes y materiales–, son especialmente interesantes las intervenciones pictóricas en dimensiones tridimensionales. Reconocida por el vigoroso y sutil romanticismo que caracteriza a sus manchas, Katharina Grosse (1961, Alemania) ha desarrollado una poética de invasión cromática la cual, a través de tierras, objetos, muros, techos y pisos pintados, genera escenarios que seductoramente atrapan la visualidad, corporalidad y emotividad de los espectadores.

Magistral en la creación de situaciones sorpresivas, la artista ha demostrado que la pintura y la belleza tienen un lugar predominante tanto en espacios cerrados como en el ámbito del arte público. Presentes continuamente tanto en ferias como en bienales, exposiciones museísticas e intervenciones públicas, las manchas aerosoladas de esta creadora pueden conocerse a través de su página web www.katharinagrosse.com

En lo que se refiere a la presencia de la pintura en el ámbito callejero –postgraffiti y street art–, al margen de las atractivas y muy conocidas propuestas realizadas con esténciles por artistas como el francés Blek Le Rat (www.blekmyvibe-free.fr) o el británico Banksy (www.banksy.co.uk), sobresale actualmente un artista que ha desarrollado un interesante concepto de murales animados (“wall painted animation”). Con una nacionalidad ambigua y desconocida que oscila entre italiano y argentino, el creador Blu pinta, dibuja, borra y fotografía grandes muros y espacios callejeros para realizar numerosas tomas que, bajo la técnica conocida como stop motion o cuadro por cuadro, se convierten posteriormente en atractivas y sorprendentes animaciones. Vinculado a las estéticas que fusionan el humor con la crítica y la reflexión política, Blu ha intervenido muros en ciudades como Belén, Barcelona y Berlín. Sus dibujos, murales fijos y murales animados pueden verse en www.blublu.org.

La vitalidad que caracteriza al escenario pictórico global exige una reflexión profunda sobre la situación de la pintura en nuestro país. Despreciada durante el siglo XXI por la promoción institucional y carente de una educación artística que le permita ser competitiva, la pintura joven de México se encuentra en una crisis creativa que debe ser atendida. Un reto para 2010 que involucra a las instituciones gubernamentales, a los filántropos culturales y a los protagonistas del mercado mexicano del arte contemporáneo.

 

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