MEXICO, D.F., 13 de abril (apro).- La Organización de las Naciones Unidas  (ONU) y Human Rights Watch (HRW) se pronunciaron en favor de las reformas a la Constitución mexicana en materia de derechos humanos aprobadas por el Senado el pasado 8 de abril, y exhortaron a los integrantes de la Cámara de Diputados a respaldar el proyecto de decreto.

 A través de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), el organismo internacional hizo un reconocimiento a los senadores por votar en favor de las reformas constitucionales, consideradas en el primer capítulo de la Constitución, que ahora se denomina “De los derechos humanos y sus garantías”, proyecto de decreto que fue recibido hoy en la Cámara de Diputados para su análisis y dictaminación.

En un comunicado, la  OACNUDH afirmó que la ratificación del documento por los diputados significaría “un avance sustantivo a favor del respeto y garantía de los derechos humanos de las personas, respondiendo positivamente a los compromisos internacionales asumidos por el Estado mexicano”.

Además, recomendó la aprobación de “diversas disposiciones constitucionales en materia de amparo”, pendientes de ser analizadas en la Cámara de Diputados, para favorecer “el cumplimiento de las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos”.

El organismo llamó nuevamente a los diputados mexicanos para que secunden a los senadores en su aprobación del proyecto de decreto, debido a que “promueve la armonización de su marco normativo interno con los principios y estándares internacionales de protección de los derechos humanos y permite avanzar en el efectivo goce de los derechos y libertades de las personas”.

Por su parte, el director de HRW, José Miguel Vivanco envió una carta a los miembros de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados,  para “instarlos a que aprueben las reformas constitucionales en materia de derechos humanos”.

Para Vivanco, “la aprobación de estas reformas representaría un paso fundamental para garantizar una mayor protección de los derechos humanos en México, y sentaría una base sólida legal para los compromisos asumidos por el Estado a través de tratados internacionales”.

La carta, de cinco cuartillas y fechada en Washington, sede de HRW, está dirigida a los legisladores Francisco Rojas Gutiérrez, del PRI; Josefina Vázquez Mota, del PAN; Alejandro Encinas Rodríguez, del PRD; Juan José Guerra Abud, del PVEM; Pedro Vázquez González, del PT; Reyes Tamez Guerra, del Panal, y Pedro Jiménez León, de Convergencia.

En el documento se incluye en cuatro puntos los “cambios positivos” a la Constitución, entre ellos el reconocimiento a “la importancia del derecho internacional”, lo que obliga a México a “armonizar la Constitución con las normas internacionales”, como le fue recomendado  en el Comité de Derechos Humanos de la ONU.

Para HRW, el proyecto a escrutinio de los diputados, “establece una clara definición de cómo y en qué circunstancias se puede declarar el estado de emergencia y qué derechos pueden ser suspendidos”, además de que faculta al Congreso de la Unión a hacer la declaratoria de emergencia.

Además, se señala que las reformas aprobadas por el Senado, facultan a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) “a realizar investigaciones sin impedimentos y a exigir a aquellos funcionarios del Estado que no cumplan con sus recomendaciones que rindan cuentas por sus actos”.

La organización internacional afirma que el proyecto “brinda garantías contra la expulsión arbitraria de extranjeros”, como otra virtud del documento en manos de la Cámara de Diputados.

En su misiva, Vivanco invita a los integrantes de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados a compartirla con los dirigentes de sus respectivos partidos e “impulsen” a los integrantes de las comisiones de Derechos Humanos y Puntos Constitucionales para que “aprueben la totalidad de las reformas a la brevedad y las remitan  la Cámara para su votación”.