VILLAHERMOSA, Tab., (apro).- Debido a que “el régimen se pudrió y ya no sirve, hace falta una verdadera sacudida, pues no se justifica que México sea un país rico con pueblo pobre”, advirtió aquí el precandidato presidencial del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador. En el primer día de gira por Jonuta, Balancán, Tenosique y Emiliano Zapata -- cuatro de los 12 municipios que visitará en tres días--, el político tabasqueño dijo que esto se debe a los malos gobiernos del PRI y PAN, y por ello, subrayó, ya se cuenta con un proyecto alternativo de nación con tres propuestas para enfrentar la crisis: honestidad, justicia y amor. Sin embargo, aconsejó a sus paisanos no ver a los priistas y panistas como enemigos porque, argumentó, están igual de “amolados” como la mayoría de los mexicanos, y reiteró que los verdaderos adversarios son “con los de mero arriba. “Vamos a dar la lucha para que transformemos al país. Vengo a decirles que nos ayuden”, demandó y pidió convencer a priistas y panistas que conviene un verdadero cambio. Acompañado por el senador con licencia Arturo Núñez Jiménez, virtual candidato de las izquierdas al gobierno del estado, López Obrador reiteró que México atraviesa por uno de los peores momentos de su historia, debido a la crisis económica, el desempleo, la corrupción, la inseguridad y la violencia; y que el único remedio es un cambio real de gobierno. Dijo que la atención preferente será para los pobres, convenciendo a los que están mejor económicamente “que es lo que nos conviene a todos”, pues de seguir esta monstruosa desigualdad, “continuará la frustración, los estallidos de odio, de resentimientos, de inseguridad y violencia. “Hace falta darle la mano al que se quedó atrás”, convocó y dejó abierta la posibilidad de construir una presa en el río Usumacinta, en Tenosique, para controlar las inundaciones, un proyecto cancelado durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari. “Ese plan Usumacinta-Grijalva-Papaloapan va a incluir la siembra de un millón de hectáreas, pero también va a incluir la posibilidad, ya lo estamos analizando, de que haya control de inundaciones en este río (Usumacinta), porque no hay ninguna presa, no hay ningún control de las avenidas de agua”, explicó. Aclaró que, en caso de llegar a la Presidencia de la República, la presa sólo sería para controlar inundaciones y no como hidroeléctrica, como fue concebida por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) en la zona del Usumacinta, en los límites con Guatemala. “A nosotros no nos hace falta una presa para generar energía eléctrica, pero sí para controlar las aguas del Usumacinta", aseguró y mencionó que también se considera el desazolve de los ríos Usumacinta y Grijalva en su desembocadura al Golfo de México, e impedir la construcción de unidades habitacionales en zonas bajas para proteger a la población de inundaciones. Adelantó que el plan también incluye controlar las presas del Alto Grijalva ya que, machacó, “no es justo que se inunde Tabasco por el mal manejo de esas hidroeléctricas”.