MÉXICO, D.F. 24 de marzo (apro).- El presidente Felipe Calderón Hinojosa designó a Antonio Vivanco Casamadrid nuevo titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), en sustitución de Alfredo Elías Ayub.

El relevo, motivado por problemas de salud de Alfredo Elías, había sido anunciado desde el pasado 18 de febrero, cuando Casamadrid, quien hasta entonces se desempeñaba como coordinador de asesores del presidente, fue designado director general adjunto para realizar la entega-recepción.

Alfredo Elías fue director de la CFE durante 12 años. Hasta hoy, fue uno de los pocos funcionarios transexenales en la alternancia, desde que en 1998 fue designado por el entonces presidente Ernesto Zedillo, ratificado en el 2000 por Vicente Fox y luego, por Felipe Calderón en diciembre de 2006.

Durante su mensaje, Calderón destacó que el director saliente logró modernizar el suministro de energía, hasta dotar del servicio al 98 por ciento de las familias mexicanas.

Además, el presidente mencionó la forma en que la CFE hizo frente a la contingencia tras las inundaciones del río Grijalva y atribuyó a Elías Ayub la liberación del cauce, así como el desarrollo de fuentes de energía alternativa, específicamente, eólica.

Sin mencionar a Luz y Fuerza del Centro (LyFC), empresa desaparecida por el propio presidente y absorbida por la CFE, Calderón se refirió al papel de Elías Ayub, que según él asumió con “gran capacidad técnica” la distribución de energía en el centro del país.

En poco menos de un año,  la CFE había aumentado “ya varios cientos de miles de nuevos contratos de suministro que incrementaron la calidad del servicio”.

Elías Ayub llegó al salón “Manuel Ávila Camacho” de Los Pinos en una silla de ruedas eléctrica y se apoyó en muletas para tomar su lugar en el acto. Desde su asiento, dirigió un breve mensaje en el que fue más explícito sobre LyFC.

“Durante su gestión (de Felipe Calderón), CFE ha enfrentado también grandes desafíos, algunos asociados a fenómenos naturales y otros, producto de sus decisiones valientes que vinieron a resolver problemas estructurales añejos y que tendrían consecuencias de largo plazo de no resolverse, como fue el caso de LyFC”, dijo el ahora exdirector de la paraestatal, quien salió de Los Pinos apenas concluyó el acto.

Antonio Vivanco Casamadrid pertenece al círculo cercano a Felipe Calderón y su carrera en la administración pública se ha desarrollado rápidamente durante este sexenio.

Economista egresado del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Vivanco estudió dos maestrías, una en políticas públicas y otra en administración de empresas, ambas por la Universidad de Harvard.

Durante el sexenio de Felipe Calderón, inició como secretario técnico del gabinete social en la presidencia, y en 2007 fue nombrado secretario técnico del gabinete de infraestructura y turismo, para luego convertirse en coordinador de asesores del presidente. En los dos primeros cargos, fue uno de los responsables de integrar el Plan Nacional de Desarrollo y el Plan Nacional de Infraestructura, respectivamente.

La experiencia previa en el servicio público de Vivanco Casamadrid es limitada pues sólo fue empleado de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, así como de la Sociedad Hipotecaria Federal.

En el sector privado, trabajó en las consultoras McKinsey and Co, Mercer Management Consulting, y Sabre, de la cual fue vicepresidente.

Nervioso al micrófono, Vivanco Casamadrid leyó un mensaje en el que se planteó tres objetivos prioritarios en su nueva responsabilidad: concluir las obras pendientes de CFE, “redoblar el paso” en materia de energía renovable y continuar con la implementación de la reforma que desapareció a LyFC.

“(Pondré énfasis en) continuar con la homologación del servicio en el área metropolitana del país, de modo que la reforma estructural emprendida en el sector eléctrico en octubre de 2009 siga traduciéndose en más beneficios para los usuarios, hasta que se alcancen los estándares del resto del país”, dijo.

En el acto, estuvo presente el secretario de Energía, José Antonio Meade.