MÉXICO, D.F. (apro).- El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, comienza a perfilar su propio estilo de gobernar.
El funcionario sorprendió este viernes al reunirse con el presidente Enrique Peña Nieto en Palacio Nacional. Fue el primer encuentro formal entre ambos, para discutir asuntos relacionados con la Ciudad de México.
Desde que la izquierda tomó el poder de la capital del país, ninguno de los tres jefes de Gobierno –Cuauhtémoc Cárdenas, Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard, en ese orden--, habían sostenido un encuentro tan formal y cordial con un mandatario, menos en los albores de la administración.
El encuentro estaba programado a las 14:30 horas, pero Mancera ingresó a Palacio Nacional a las 15:45 horas. Llegó a bordo de su vehículo y entró al recinto por la puerta Mariana, caminó por el patio central y subió al primer piso para encontrarse con Peña Nieto para una reunión a puerta cerrada.
Ni la Presidencia ni el GDF dieron detalles de la charla. Ni siquiera en Twitter, red social que ambos funcionarios suelen usar con regularidad.
Peña Nieto sí tuiteó la transmisión en vivo de la recepción del boxeador Juan Manuel Márquez en Palacio Nacional.
@EPN: “Desde Palacio Nacional, la transmisión de la recepción al campeón mundial de boxeo, Juan Manuel Márquez. En vivo: http://bit.ly/NEdMc”, escribió el presidente.
Previo a la reunión, a su arribo al festejo 75 del Sindicato de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal, Mancera comentó que plantearía a Peña Nieto su propuesta de crear el plan "Escudo Centro" que implica la homologación de programas preventivos y de combate a la inseguridad en los estados del centro del país.
Añadió que también le presentaría proyectos en materia de sustentabilidad y rubros del presupuesto; y que iría acompañado por el secretario de Gobierno del Distrito Federal, Héctor Serrano, así como del titular de Finanzas, Edgar Amador Zamora.
Por la mañana, en entrevista con el conductor Carlos Loret de Mola, Mancera Espinosa dejó clara la razón de su relación con el presidente que ha sido cuestionada por militantes de los partidos que lo llevaron a la jefatura de Gobierno: PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
"Yo tengo que ver por el bien de la ciudad, yo me debo a toda la gente que votó. Debe haber una relación institucional siempre voy a tener una relación en beneficio de la ciudad", aclaró.
En la entrevista también se refirió a las versiones respecto de que podría convertirse en una carta fuerte de la izquierda para competir por la Presidencia en 2018 debido a los niveles de aceptación que tiene entre la ciudadanía.
"No. Estamos concentrados (en la ciudad). Yo no voy a usar la frase de 'que me den por muerto'. Estoy ocupado en temas de la ciudad, es pronto para hablar de esos temas. Hay que atender problemas del Distrito Federal", atajó Mancera.
Insistió en que intentará concretar la reforma política del Distrito Federal para que la ciudad logre la definición jurídica de ciudad capital, “para poder interactuar con los demás estados, interacción que hoy no tenemos, participar en reformas constitucionales...
"No buscamos que el Distrito Federal se municipalice; (lo que queremos es) que se entienda que es un ciudad donde está la sede del poder federal y podría ser la ciudad capital", apuntó.
Por la tarde, Mancera anunció la puesta en marcha de un programa de despistolización en la delegación Iztapalapa.