OAXACA, Oax. (apro).- El gobierno de Oaxaca prácticamente dio por hecho que los recientes ataques contra candidatos y políticos se deben al crimen organizado. El gobernador Gabino Cué manifestó que los “incidentes de criminalidad” por “vendettas al interior de un grupo delincuencial” suscitados en la última semana —fue ejecutado el dirigente estatal del PRD, Nicolás Estrada Merino, y en otro hecho resultó herida de gravedad la candidata del PRI, Rosalía Palma López— no ponen en riesgo el proceso electoral. Reafirmó que existen condiciones de seguridad en Oaxaca para que la jornada electoral del domingo 7 de julio se desarrolle en forma ordenada y pacífica. Consideró que el atentado donde resultó herida la candidata de la coalición Compromiso por Oaxaca (PRI-PVEM) por el Distrito 14 de Teposcolula, Rosalía Palma López, así como el homicidio del presidente del Consejo Estatal de Oaxaca del PRD, Nicolás Estrada Merino, son hechos lamentables, que de acuerdo con los primeros reportes de las investigaciones realizadas, no tienen una vinculación con el proceso electoral. Luego de calificar de “reprobables” estos atentados, el gobernador informó que la Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE) tiene instrucciones para intensificar las indagatorias que conduzcan al esclarecimiento de los crímenes y proceder con todo rigor en contra de quien o quienes resulten responsables. Respecto de la postura de la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación de “boicotear” el proceso electoral, acción que empezó con el retiro y quema de propaganda electoral y continuará con el “acordonamiento” del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana a partir del próximo cinco de julio, Cué manifestó que respeta la decisión y los acuerdos emanados de la Asamblea Estatal del magisterio. Sin embargo, confió en que el magisterio sabrá estar a la altura del tiempo democrático de Oaxaca y emitir su sufragio de manera libre y razonada por los candidatos y partidos de su preferencia. Asimismo, Cué Monteagudo indicó que en una estrecha coordinación y suma de voluntades entre los diversos actores políticos y autoridades electorales, la administración estatal trabaja de manera conjunta con los Gobiernos Federal y Municipal para garantizar que el proceso electoral del próximo 7 de julio, se desarrolle en un marco de libertad, orden, imparcialidad y democracia participativa. Finalmente, dijo que se cuenta con un protocolo de seguridad para la instalación de casillas en los municipios donde habrá elecciones, principalmente, en ayuntamientos que pudieran considerarse como “focos rojos”, a fin de que los ciudadanos ejerzan su voto de manera directa, libre y secreta. Por su parte, el Secretario de Seguridad Pública, Marco Tulio López Escamilla, reconoció que existen unos 10 municipios considerados focos rojos entre los que sobresalen Santiago Choapan, San Miguel y Santa María Chimalapa, San Mateo del Mar, San Juan Mixtepec, San José del Progreso, Pinotepa Nacional, Santiago Amoltepec, Álvaro Obregón en Juchitán, entre otros. Por lo pronto, adelantó que contarán con cuatro mil 600 policías estatales, de la Agencia de Investigaciones, de tránsito, de la Bancaria y la turística, para evitar que actos de violencia extrema afecten y agraven un derecho democrático como es votar. Insistió en que “las elecciones están garantizadas y la ciudadanía puede salir a votar y únicamente reforzaran en los municipios de mayor conflictividad por razones agrarias, políticas y sociales”. Tanto López Escamilla como el titular de la Procuraduría General de Justicia de la entidad (PGJE), Manuel de Jesús López, secundó al gobernador y al jefe policiaco al afirmar que la línea más fuerte de investigación “no es tema de violencia política y mucho menos electoral, es un tema, dijo, de delincuencia que le tocó por desgracia a la candidata Rosalía Palma al igual que a Nicolás Estrada Merino”. Ambos servidores públicos insistieron en que “hay líneas de investigación que conllevan a pensar que no es un tema político”. Sin embargo, reconocieron que todavía “no hay detenidos directamente” aunque investigan en coordinación con la Procuraduría General de la República, el Ejército Mexicano y la Armada de México. Lo que sí precisaron los funcionarios es que estos hechos si vienen a enrarecer el clima del proceso electoral pero que no tienen nada que ver. El procurador fue más directo, al señalar que atentado iba dirigido a Efraín Cruz Bruno, esposo de la candidata Rosalía Palma, porque se le atribuyó la autoría intelectual del asesinato del candidato a diputado del PRD por el distrito de Putla, Fidel Mejía, perpetrado en 2001 y por el cual estuvo detenido. Anteriormente, Efraín Cruz Bruno, compadre del exgobernador Ulises Ruiz Ortiz, también fue víctima de un atentado en el que falleció su esposa y posteriormente, en 2005, mataron a su cuñado y un sobrino. Entonces, dijo, “hay una serie de acontecimiento que rodean la vida de Efraín y ésa es la línea más fuerte que traemos”. La candidata, dijo, “está grave pero estable”. Sólo esperan su declaración para ir cerrando líneas y llevar a los responsables que están “focalizados” ante la justicia. En cuanto al caso del presidente del Consejo Estatal del PRD, Nicolás Estrada Merino, aceptó que “no tenemos un dato duro que nos permita señalar que esté vinculado con algo político y mucho menos electoral porque no estaba participando en un cargo de elección popular; no tenemos un dato duro ni siquiera de manera criminal”. Sin descartar la línea políticas, considera que la forma en cómo se dio, es decir, la camioneta es calcinada en límites con playa Vicente donde presencia del crimen organizado y el cuerpo se encuentra del lado opuesto, los hace pensar en ello de ahí que esté coadyuvando la PGR, la Policía Federal e incluso el Ejército Mexicano.