TOLUCA, Edomex. (proceso.com.mx).- Tinta indeleble que desaparecía con facilidad, mensajes telefónicos para invitar a votar en favor del PRI y del PVEM o inhibidores de la participación, instalación tardía de mesas directivas de casilla por ausencia de funcionarios, y acoso de las policías municipales, conformaron los principales incidentes de la jornada en el Estado de México. Ante el Consejo General del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), y sin que los reclamos fuesen solucionados, los representantes de los partidos políticos de oposición señalaron cada una de las anomalías sin recibir solución contundente de los consejeros. Apenas a las 13:45 horas, el IEEM confirmó la instalación del cien por ciento de las casillas, pues al menos 25 por ciento presentó un retraso de entre dos y tres horas por la ausencia de los funcionarios titulares que fueron capacitados, de tal manera que debieron sustituirse con ciudadanos de la fila. Joel Cruz, representante del PT, consideró, sin embargo, que a su vez esta problemática derivó en otra: funcionarios no capacitados, como la que le colocó la tinta indeleble con tal delicadeza que hasta parecería muy interesada en que rápidamente desapareciera, hasta en una actitud “oficiosa”. “Es necesario verificar si la tinta es de la calidad prevista en la ley”, consideró. Javier Rivera, representante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), advirtió necesario reportar e investigar este hecho, pero sobre todo reponer las tintas a la brevedad. “Tenemos infraestructura para hacerlo, para evitar leyendas urbanas e incertidumbre”. Rivera Escalona además denunció que, de manera masiva, los ciudadanos recibieron mensajes de texto con leyendas como: “Participar es importante y tu voto puede hacer la diferencia, con tu ayuda podemos lograr vales de PRImer empleo. Vota por el PVEM”, o “Despertar del sur, vamos por copa de oro, PRI gana tierra caliente, 8 puntos aventaja el PRI”. La denuncia, indicó, se concretó ante la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), quien debe investigar y sancionar la responsabilidad de la empresa telefónica, al comprador del servicio, y la manera en que se tuvo acceso a los números de los ciudadanos. En tanto, Daniel Serrano, representante de Morena, precisó que otros ciudadanos recibieron del número telefónico 735 227 3619 mensajes como los descritos por el sol azteca; además, del número 5514 41 1604, otros intimidatorios. Estos últimos, encontrados entre ciudadanos de Tlalnepantla para inhibir el voto con leyendas como: “Mira que está cabrón, en Valle Dorado y alrededores hay mucha policía y sujetos con armas en muchas casillas” o “Sigue gente armada por Valle Dorado, ya hasta cerraron las casillas”. Horacio Jiménez, de Movimiento Ciudadano, indicó que el mismo fenómeno ocurrió en Naucalpan para invitar a votar por el PRI. Aunque no lo refirió al seno del Consejo, Rubén Darío Díaz, representante del PAN, indicó que también se presentó en municipios como Huixquilucan. Por su parte, el presidente del IEEM se comprometió a investigar el hecho, en virtud de que se encuentra tipificada como delito la difusión de información dolosa durante la jornada. Los representantes también denunciaron complicidad de las autoridades policiacas y ministeriales para liberar de manera inmediata a militantes del tricolor detenidos en la comisión de alguna conducta constitutiva de un posible delito electoral, como el caso de Ramiro Rendón, alcalde de Juchitepec, retenido por la entrega de dinero a cambio de votos. En contraste, denunciaron que los cuerpos policiacos se excedieron con militantes de oposición, como en Ixtapaluca gobernado por Antorcha Campesina, donde de acuerdo con Javier Rivera y el senador Luis Sánchez, al menos 29 perredistas fueron detenidos y golpeados, entre ellos el menor Fernando Alexander Tejeda Salazar, por lo que se acusó uso ilegal de la fuerza pública. También fue detenido cuando intentaba sufragar el candidato del PRD a diputado por el distrito 42 de Ecatepec, José Antonio López Dossano. El Partido Humanista, por su parte, denunció compra de voto y afirmó contar con las documentales para demostrar que las dádivas fluctuaron entre los 400, 500 a cuatro mil pesos. También acusó la presencia de gente armada en las casillas 1996 y 2037 de Huixquilucan. Representantes de oposición también acusaron a los consejeros del IEEM de ser omisos con el acuerdo asumido un par de días antes para prohibir el uso de teléfonos celulares en las casillas, como un mecanismo para contrarrestar la posibilidad de venta del sufragio.