MÉXICO, D.F., 6 de enero (apro).- La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) apaciguó a creyentes del culto de la santa muerte, quienes habían programado una protesta para las 11:00 horas de este jueves por la detención de su líder, David Romo Guillén.

La marcha se canceló luego de que el procurador capitalino, Miguel Mancera, aclaró a los integrantes de la Iglesia de la Santa Muerte que Romo Guillén fue aprehendido por un caso de secuestro, no por la fe que profesa.

El funcionario local detalló que el “obispo” --como se hace llamar Romo Guillén--, ha sido señalado directamente por sus supuestos cómplices como partícipe en el secuestro de un matrimonio de personas de la tercera edad en la delegación Magdalena Contreras.

De acuerdo con Mancera Espinosa, uno de los detenidos refirió que Romo lo presionó para que le prestara su cuenta bancaria para que las víctimas del secuestro le hicieran una transferencia como parte del pago para su liberación.

El procurador capitalino insistió que se investigan hechos concretos y no cultos, por lo que descartó que se pudieran hacer indagatorias respecto de los lugares donde se venera a la muerte y donde presuntamente se dan cita delincuentes.

Hasta el momento, puntualizó, no hay certeza de que el templo en cuestión haya sido utilizado como instrumento de delito, por lo que no se solicitará que le sea aplicada la Ley de Extinción de Dominio.

David Romo Guillén fue detenido el pasado martes 4,  junto con nueve integrantes de una banda de secuestradores conocida como “Los Aztlán”, a quienes se les acusa de robo agravado calificado, secuestro agravado y delincuencia organizada.

De acuerdo con la PGJDF, el dinero de los rescates se depositaba a una cuenta a nombre de Silverio Reyes Fremain Cortés, alias que utilizaba David Romo.