MÉXICO, D.F. (Proceso).- Independientemente del resultado del 1 de julio, las elecciones del 2012 habrán sido las más rigurosamente vigiladas de la historia contemporánea de México. Las razones para tal comportamiento social son muchas: la coyuntura demográfica que lleva a 14 millones de jóvenes a votar por primera vez, la difusión entre ellos de las nuevas tecnologías que quiebran las barreras de entrada puestas por los grandes consorcios a la comunicación, las defraudaciones de 1988 y el 2006, el exceso de apariciones televisivas del candidato presidencial que se dice puntero desde hace 7 años, el uso del Twitter vacío, sin personas reales que lo sostengan, los espectaculares gigantescos con la foto de Peña Nieto en las calles y carreteras, la compra de encuestas y su divulgación como material de campaña del PRI, el desperdicio de recursos en publicidad política. Todo lo anterior unido a la circunstancia de una ciudadanía exigente que ya ha transitado mentalmente a la democracia y siente como rémoras los aparatos mediáticos tradicionales, las instituciones del Estado encargadas de organizar y calificar las elecciones, las prácticas del dinosaurio que da coletazos cuando lo sorprenden en una marrullería, la guerra sucia en spots que se ven tan viejos como los tiranosaurios, la machacona consigna de que el puntero no se mueve y por tanto será el ganador. Frases, actos, imágenes expresiones de un pasado en el que no se quiere permanecer. Usando su imaginación y su teléfono-cámara-video-internet móvil los muchachos están ideando plataformas, redes, colecciones de videos para youtube, de fotos, de voces, consignas y canciones con el fin de documentar el comportamiento del aparato priísta, del aparato estatal, de funcionarios, de grupos rijosos. Y son muchos, están en todo el país y los tienen rigurosamente vigilados. ¿Es esto suficiente para advertir a la maquinaria que no puede haber otro fraude porque las irregularidades documentadas pueden desbaratarlo? No es suficiente pero sí necesario. A golpe de conciencia, de iluminar los espacios oscuros, de hablar sin retruécanos, tomar las plazas, las avenidas, las explanadas, los jardines, caminar, expresarse, citar a encuentros, diálogos, debates con los candidatos para que si llegan les cumplan. Entre las muchas iniciativas se encuentra En la democracia todos contamos, que se puede encontrar en la red como contamos.org.mx En esta se han ido subiendo reportes de todos los estados con denuncias sobre todo aquello que pueda constituir un delito electoral, por ejemplo acarreos a mítines, uso de vehículos públicos para fines electorales, compra del voto, agresiones a manifestantes, rifas a los asistentes a actos de campaña. La gente envía a veces fotos, o videos o documentos para constatar sus dichos. “Contamos” verifica que los envíos sean veraces y así está especificado para cada uno. Del 25 de abril al 19 de junio se tienen y se pueden consultar 81 reportes. Estos han venido aumentando conforme se acerca el día de los comicios, cada día se suman más voluntarios para organizar la tarea y tenerlos a todos rigurosamente vigilados.