MÉXICO, D.F. (apro).- El Banco de México (Banxico) mantuvo sin movimientos la tasa de interés interbancaria a un día (4.5%), pese a las presiones en la inflación durante los últimos meses. Sin embargo, el banco central advirtió que “sería procedente llevar a cabo un ajuste al alza en la tasa de interés de referencia, con el objeto de consolidar el anclaje de las expectativas de inflación, prevenir la contaminación al resto de los procesos de formación de precios en la economía nacional y no comprometer la convergencia de la inflación al objetivo permanente de 3%”. Al hacer el anuncio de política monetaria, el organismo encabezado por Agustín Carstens aclaró que en caso de que persistan los choques inflacionarios, “aun si se presume que sean transitorios y los cambios en la tendencia de la inflación general y de la subyacente no se confirman”, usará los instrumentos a su alcance. En los últimos meses, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ha ubicado por arriba de la meta propuesta por el Banxico para 2012, que es de 3%. De hecho, ha estado lejos de lo planteado: en julio, la inflación fue de 4.42%; en agosto, 4.57%; mientras en septiembre se disparó a 4.77% ante el incremento de precios en el huevo y otros productos agropecuarios, principalmente. El Banxico lo explicó así: “En México, la ocurrencia de una serie de choques de oferta que incrementó los precios de algunos alimentos, principalmente del subíndice de precios no subyacente, ha propiciado un alza considerable en la inflación general en los últimos meses”. Sin embargo, la institución encargada de poner en marcha la política monetaria del país aún mantiene las esperanzas de que el alza de precios sea transitoria. “Teniendo en consideración la naturaleza transitoria de los referidos choques, se estima que el incremento en la inflación sea temporal”, señaló. El miércoles 24, Carstens reconoció que el Banxico está “seriamente preocupado” por los recientes incrementos de precios en los alimentos. Al presentar el primer contrato de futuros de maíz en México, Carstens alertó que “estamos seriamente preocupados por los incrementos de precios, sabemos y así lo demuestran los datos, que se limitan a unos cuantos productos y que deben tener un carácter transitorio, en la medida de que en las condiciones normales de oferta se reestablecerán”. Por otra parte, en la situación económica global, el Banco de México confirmó que el ritmo de crecimiento sigue perdiendo dinamismo. En Estados Unidos, principal socio comercial del país, la actividad económica siguió mostrando un crecimiento moderado “en un entorno en el que prevalece incertidumbre acerca del tamaño del ajuste fiscal que podría aplicarse en 2013 y de su efecto sobre dicha economía”. Mientras que en la zona del euro, la actividad económica sigue en pleno desplome debido a los procesos de ajuste fiscal y crediticio resultantes de los desequilibrios presentes en varios países de la región. En tanto que en las economías emergentes, “la actividad productiva siguió desacelerándose como resultado de la debilidad de la demanda de las economías avanzadas y, en algunos casos, también de la demanda interna”.