CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Esta mañana fueron trasladados a su país natal, España los restos de la ciudadana española María Pilar Garrido Santamans, quien presuntamente fue asesinada por su esposo, Jorge Fernández Villarreal, según la versión de la Procuraduría de Tamaulipas. En rueda de prensa, familiares de la víctima anticiparon que peritos españoles realizarán estudios de ADN a los restos óseos de Pilar para descartar cualquier duda de las indagatorias realizadas por las autoridades tamaulipecas. “Yo vine por si todavía la podíamos rescatar en vida, irnos todos juntos, Jorge, el niño, Pilar y yo; estando aquí ya dijeron que era ella y no sé con qué imagen me voy, de momento me voy con la alegría de llevarme a Dalmau porque me la han puesto fácil las autoridades, aquí en México los papás del marido tienen más derecho que los papás de la mamá”, señaló. Los gastos de traslado, la necropsia y los exámenes de ADN serán cubiertos por la Generalidad Valenciana. “En nuestra familia vamos a seguir preguntando quién mató a Pilar, yo no creo que sea Jorge (su marido), creo todavía y confío en él, y tendrán que demostrar muchas cosas más de lo que me están diciendo para poder creer que fue Jorge, pero sí quiero saber quién mató a mi hija”, dijo. Jorge Fernández Villarreal y Adriana González, padres del detenido, indicaron que desde que fue denunciado el caso el gobierno español ha presionado a las autoridades tamaulipecas para dar resultados en sus investigaciones, y derivado de ello fueron 30 entrevistas, 20 intervenciones periciales, siete inspecciones ministeriales y 10 operativos de búsqueda en los municipios de Soto La Marina y Abasolo. “La Procuraduría se vio presionada por los medios de España, por ello hicieron un dictamen rápido, inconsciente e injusto”, consideró Adriana González. “Ese operativo tan inmenso que se hizo en esa zona pudo haber asustado a estos dos jovencitos que plagiaron a Pilar y que no pidieran rescate del secuestro y que pensaran en un plan B, quién sabe qué pasó”, comentó Jorge Fernández. Los restos de Pilar fueron hallados en un paraje cercano a Soto La Marina después de 24 días de búsqueda. La versión inicial que ofreció su esposo, Jorge, fue que la mujer había sido plagiada a principios de julio por un comando que los detuvo en la carretera y que sólo se llevó a la ciudadana española.