CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La diputada local Paula Soto Maldonado, de Morena, exhortó a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) y a la Federación Mexicana de Natación (FMN) a investigar y emprender acciones urgentes para atender las denuncias por violencia psicológica en contra de las integrantes del equipo mexicano de natación artística. Luego de que un grupo de nadadoras hizo público que han sido víctimas de abusos y maltrato psicológico por parte de la entrenadora nacional, Adriana Loftus, Soto Maldonado propuso el punto de acuerdo en el Congreso de la Ciudad de México, que leyó este martes desde la tribuna ante la ausencia de la diputada Donají Olvera. Nota relacionada: [embed]https://www.proceso.com.mx/618517/entrenadora-de-humillo-y-acoso[/embed] “Se exhorta a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte para que garantice espacios seguros y libres de cualquier tipo de violencia hacia las y los atletas mexicanos, en particular en el combate de los estereotipos de género en su quehacer institucional, y en su caso brinde la atención física y psicológica correspondiente a sus atletas”, indica el punto de acuerdo. Al exhorto se unió la legisladora Valentina Batres. Las legisladoras hicieron hincapié en que el artículo 10 del Reglamento Deportivo, Disciplina De Nado Sincronizado de la FMN, con vigencia del 14 de octubre de 2017 al 14 de octubre de 2021, refiere que las entrenadoras nacionales “deben mantener una buena conducta social e imagen personal, ya que es motivo de imitación de sus atletas y carta de presentación de México en el extranjero” , y que tanto en los entrenamientos como en las competencias no se debe de emplear “violencia física o moral, actuar contra las buenas costumbres, la dignidad e integridad de los individuos, sus garantías constitucionales o sus derechos humanos, con la intención de ocasionarle un daño”. Si esto sucede, la Federación Mexicana de Natación tomará decisiones al respecto, además de que tienen la obligación de respetar y escuchar las opiniones de los especialistas del deporte respecto a sus deportistas. Las diputadas retomaron los testimonios que las nadadoras Teresa, Ana Karen, Madison, Yulieth, Samantha y Renata subieron a las redes sociales, donde dijeron ser víctimas de violencia por parte de Adriana Loftus, quien las humillaba por subir de peso y las obligaba a entrenar sin importar los riesgos de salud que tenían por no comer y las dietas estrictas a las que eran sometidas. Las exseleccionadas nacionales narraron el deterioro en su salud mental, que las llevó sufrir cuadros de depresión severa y ansiedad por la violencia psicoemocional “Ese era el precio que tenían que pagar por pertenecer al equipo de natación artística y algún día llegar a competir en los Juegos Olímpicos. Ante la ola de denuncias, ninguna autoridad deportiva nacional ha emitido declaración alguna que muestre las acciones emprendidas para proteger a las mujeres atletas e investigar sus denuncias”.