México, D F, 13 de junio (apro)- Considerado uno de los grandes compositores del siglo XX, el músico austriaco de origen húngaro György Ligeti falleció ayer a la edad de 83 años, luego de una grave y prolongada enfermedad Autor de obras como la ópera Le Grand Macabre y la banda sonora de la película 2001: odisea del espacio de Stanley Kubrick, Ligeti nació el 28 de mayo de 1923 en Transilvania Su padre y hermano murieron en campos de concentración y él tuvo que huir a Austria después de la revolución húngara de 1956 Estos hechos lo marcaron profundamente y desarrolló una aversión a las dictaduras Afirmaba: "Soy un enemigo de la ideología en las artes Los regímenes totalitarios no tienen gusto de disonancias" Ligeti realizó sus estudios con Ferenc Farkas entre 1941 y 1943, y posteriormente ingresó a la Academia de Franz Liszt en Budapest, donde recibió clases del mismo Farkas, de Sándor Veress, Pál Járdánvi y Lajos Bárdos Después, desarrolló el llamado "micropolyphony", que fue una de las características de su música En 1961 creó un trabajo de orquesta al que bautizó como Atmosphères Según la crítica, rompía en él los parámetros melódicos, armónicos y rítmicos tradicionales De acuerdo con el desaparecido crítico musical José Antonio Alcaraz, no podía negarse la influencia del músico estadunidense Conlon Nancarrow en Ligeti En agosto de 1997 publicó en su columna en la revista Proceso una carta que Ligeti envió a Charles Amirkhanian, fechada el 4 de enero de 1981 en Viena, en la cual le dice: "escuché la música de Nancarrow y de inmediato me volví un entusiasta Esta música es el descubrimiento más grande desde Webern y Ives, algo grande, importante para toda la historia Su música es tremendamente original, disfrutable, construida de manera perfecta y emociona al mismo tiempo para mí es el mejor compositor viviente" Tras la muerte de Ligeti, el canciller austriaco Wolfgang Schuessel dijo que el compositor produjo "hitos en la historia de la música" y fue "uno de los portavoces de la nueva música en Europa y enriqueció el arte musical con sonidos inconfundibles" Sin saber que se agravaba el estado de salud de Ligeti, el concierto de la Orquesta Filarmónica de la UNAM del pasado domingo en la Sala Nezahualcóyotl, incluyó la obra Concierto para violín, del compositor austro-húngaro