Teatro de ciertos habitantes
MÉXICO, D.F. (apro).- La compañía Teatro de Ciertos Habitantes, conducida por el inquieto Claudio Valdés Kuiri y cofundada por Igor Lozada, actualmente director de Vinculación y Difusión Cultural de la Universidad de Guadalajara, celebra 15 años de existencia como uno de los grupos independientes de teatro más importantes de México y sin duda en de mayor proyección internacional.
Las celebraciones iniciaron en diciembre pasado con la función especial en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris de El gallo, ópera para actores que, a decir de la propia compañía, ofrece la posibilidad de presenciar la intensidad de un proceso creativo, antes que la obra sea estrenada, para posteriormente asistir a la dicha presentación.
Se trata de un trabajo realizado en colaboración con el compositor británico Paúl Barker, “un encuentro armónico entre el teatro y la música contemporánea” estrenado en el Festival de México en el Centro Histórico en Marzo (actualmente Festiva fmx) en 2009 y que desde entonces se ha presentado en diversos foros alrededor del mundo.
Como parte de las celebraciones tienen contemplado realizar la versión para televisión de El Gallo, así como una temporada del monólogo Todavía… siempre, interpretado por la actriz Tara Parra, en el Centro Cultural del Bosque, a partir de mayo próximo.
Se trata de una obra que --señala Valdés Kuri-- surge de historias personales de "jóvenes de la tercera edad. Habla sobre el acompañamiento a los moribundos. Un tema que nos concierne a todos”.
Todavía… siempre, escrita por Claudio Valdés y Conchi León, es una propuesta muy tradicional, muy diferente a los trabajos de experimentación que caracteriza a Teatro de Ciertos Habitantes. “Descubrimos que para el tema que aborda esa obra era necesario hacerlo lo más generoso y sencillo posible. Es un ejemplo de las necesidades vitales del cambio”.
Los temas del colectivo han ido cambiando según las vivencias de quienes lo integran pero sobre todo porque, explica Valdés Kuri, con el tiempo “la conciencia se va expandiendo y como todo artista en un principio la atención está en uno mismo, pero cada vez que vas alcanzando nuevos estadios hay un nuevo lenguaje.
“Tu mirada dejas de ser tú y empiezas a voltear hacia al otro, entonces piensas cómo puedo servir al otro, qué puedo comunicar de lo que he aprendido. Ese ha sido el cambio digamos sutil pero más importante. ¿Cómo podemos como colectivo aportar con elementos de conciencia a nuestro entorno?
“Eso es por una parte en cuanto a los contenidos, pero también en la forma ha habido un avance muy importante. Aunque es una estructura abierta la compañía, un grupo de actores que no se repiten en cada puesta de escena, sí hay una acumulación de experiencia que se transmite a los nuevos.
Estos cambios han dado madurez a la compañía y han propiciado que la experiencia acumulada sea transmitida a través de la experimentación de lenguajes y formatos que incluyen documentales fílmicos, radionovelas, proyectos de diseño y ciclos de conferencias, entre otros.
“Hoy por hoy, con los proyectos que están en repertorio y los proyectos que se están creando, con alrededor de 25 artistas escénicos más los creativos, la compañía ha crecido mucho, es un colectivo muy interesante y los retos van cambiando mucho”, concluye Claudio Valdés Kuri.
Así como la edición de todas las obras de teatro que han realizado.