Música: 50 años del Centro Cultural del Bosque
MÉXICO, D.F. (Proceso).- El Centro Cultural del Bosque (CCB) está ubicado atrás del Auditorio Nacional, en la esquina de Campo Marte y Reforma, en el corazón del Bosque de Chapultepec. Es un Conjunto Cultural único en México.
Ahí se encuentra la Dirección del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), la Compañía Nacional de Danza, la Compañía Nacional de Teatro, y la Escuela Nacional de Danza Folclórica, además de cinco emblemáticas salas teatrales, que funcionan permanentemente: El Granero, Orientación, Sala Xavier Villaurrutia, Julio Castillo y Teatro de la Danza. También la Plaza Ángel Salas, y el propio Auditorio Nacional (con su Lunario), que el año pasado cumplió 60 años.
La construcción inconclusa del inicial complejo ecuestre se reorientó para dar lugar a un conjunto teatral; la adaptación no fue del todo funcional, pero felizmente se pueden hacer cosas que en teatros convencionales no serían posibles. Originalmente se le llamó Unidad Artística y Cultural del Bosque.
Los espacios del CCB no fueron realizados con presupuesto oficial, sino con los ingresos que daba el Auditorio Nacional.
Rememora Jorge Ballina que fue en el teatro Julio Castillo donde se estrenó como director de escena con la ópera Muerte en Venecia:
“Es un espacio fabuloso, tiene un escenario tan grande que hemos hecho obras con el público sobre él y cabe una muy buena cantidad de público. Por su parte la Sala Xavier Villaurrutia es un espacio que tiene un encanto increíble, es muy pequeño, cabe poca gente, el techo es muy chaparro, pero tiene una magia muy especial. Es una sala que ha sido descubierta y bien aprovechada hasta hace relativamente poco tiempo, en donde se pueden hacer cosas maravillosas y con un equipo técnico siempre muy cooperador.”
El Teatro de la Danza, único espacio del país dedicado exclusivamente a la danza, es el escenario donde habitualmente pone a la vista su trabajo la Escuela de Danza Folclórica del INBA, sin descartar otras propuestas.
El Galeón fue levantado en lo que originalmente era una bodega; el director escénico Abraham Oceransky lo concibió y batalló hasta lo increíble para su realización, llegó inclusive a protestar desnudo frente a la residencia oficial de Los Pinos.
El Orientación fue creado en 1957 exclusivamente para títeres, y recreo infantil; contaba con juegos, una fuente, jaulas para venados, salón de cantos y rondas, una pianista, pizarrones con gises para dibujar, y fuente de sodas. Todo para los niños.
En la Plaza Ángel Salas cada 12 de octubre desde hace 33 años se realiza un festival de danza folclórica instituido por Marcelo Torreblanca, sin duda el mayor promotor de la danza tradicional en México.
El teatro Granero debe su nombre a que fue construido donde fuera la bodega para el alimento de los caballos del centro ecuestre, inició su construcción en 1952 y es el primer teatro circular en México.
El legado del CCB es inmenso: Ha albergado a grupos dedicados a la experimentación teatral y ha presentado propuestas que forman parte toral de la historia cultural y teatral de nuestro país.
En la Memoria conmemorativa CCB 50, publicada por el INBA, el director teatral Luis de Tavira recuerda:
“Hace unos años por voluntad presidencial se trató de echar a andar un proyecto de renovación del CCB para crear un gran centro de convenciones, implicaba la desaparición de El Galeón, yo no estuve de acuerdo; no se destruye el teatro hasta que no se construya el nuevo. Pero ni aún en ese caso. El día que entraron las máquinas para demolerlo, los actores del Centro de Experimentación Teatral abrazamos el edificio, lo rodeamos, Brígida Alexander, de 80 años, estaba adelante al frente de las máquinas. Ahí nos paramos y dijimos: ‘Sobre nuestro cadáver’.”