Monterrey, N L, 30 de octubre (apro)- Enrique Borja fue designado presidente de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León, en sustitución de Fernando Urdiales, quien fue despedido esta mañana Borja ya había sido presidente del equipo felino de 1999 a 2001, y había entrado al relevo, precisamente de Urdiales, quien estuvo, en su primera etapa, en 1998 y 1999 Desde su segunda llegada en 2004, Urdiales no pudo hacer que el equipo triunfara Actualmente, el club auriazul se encuentra involucrado en problemas de descenso, en el penúltimo lugar de la porcentual y de la tabla general, con 12 puntos Como una de sus primeras decisiones, Borja ratificó como director técnico a Américo "Tolo" Gallego, quien llegó al equipo al inicio de la presente campaña y quien, pese a su palmarés de ganador, no ha conseguido que el equipo despegue El entrenador argentino permanecerá también durante toda la campaña siguiente, adelantó Borja, de 62 años de edad En conferencia de prensa realizada en el Estadio Universitario, donde se encuentran las oficinas del club, Raúl Salinas consejero delegado de Cementos Mexicanos (Cemex), empresa propietaria del equipo, hizo el anuncio del relevo Por su parte, Urdiales, quien se reintegrará a labores administrativas de la cementera, dijo que se sentía triste por haberse ido sin darle a la afición un campeonato "Me voy tranquilo A pesar de que hubo detalles, nunca tuve un problema con ninguno de ustedes (los periodistas) Igualmente, en el club, dejo muchos amigos, nuevos amigos Tengo la convicción de que hay un excelente plantel; eso nadie lo duda", dijo A su vez, Borja --quien fue tres veces campeón de goleo y referente del América, Pumas y la selección mexicana--, dijo que se reunió ya con los jugadores del plantel, a los que pidió un esfuerzo extra en los tres partidos que restan en la liga Afirmó que Tigres "es un equipo grande, pero necesita serlo más aún" Añadió: "Me da muchísimo gusto colaborar nuevamente en esta institución; espero continuar con el trabajo que se ha hecho" Borja, quien se retiró como jugador activo con el América en 1977, se convirtió en presidente del Necaxa y de la Federación Mexicana de Futbol en los 90s De ahí, dejó la empresa Televisa, propietaria de los Rayos, y emigró a Tigres, donde tuvo que apresurar su salida, dejando números mediocres, luego del escándalo de la falsificación de firmas en la contratación para el equipo felino del brasileño Osmar Donizete, en 2000, problema por el que el equipo perdió el liderato y se quedó sin liguilla en esa temporada Por ese problema, Borja tuvo que dejar la presidencia de la Femexfut