MÉXICO, D.F. (apro).- El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que la inflación en junio disminuyó 0.06% y se colocó a una tasa anual de 4.09%. Luego de que en abril pasado el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) tocó su punto máximo al ubicarse en 4.6%, debido a los elevados precios del tomate verde y el limón, en el sexto mes del año la inflación se acercó a la meta propuesta por el Banco de México (Banxico), que es del 3% (+/- un punto porcentual). En lo que va del 2013, el INPC ha tenido el siguiente comportamiento: en enero su tasa anual fue de 3.25% y un mes después de 3.55%, mientras que en marzo se colocó en 4.25% y en abril se elevó a 4.65%. En el quinto mes alcanzó 4.63% y en junio 4.09%. En el sexto mes la inflación fue impulsada principalmente por el precio del aguacate, que subió 23.10%; la papa y otros tubérculos, con un aumento de 9.23%, y los servicios turísticos en paquete, con un incremento de 2.97%, mientras que la gasolina de bajo octanaje (Magna), tuvo una variación de 1.37%. En menor medida aumentaron los precios de la cerveza, gas doméstico LP, restaurantes y similares, así como de la vivienda propia. En contraste, el tomate verde bajó 56.25%; limón, 33.06%; chile serrano, 31.01%; chayote, 21.64%; uva, 19.10%; calabacita, 18.56%, y huevo, cuyo precio se redujo 3.71%. El Inegi precisó que en el sexto mes del año la inflación subyacente se elevó 0.13% para colocarse a una tasa anual de 2.79%. Este índice está compuesto por los precios de alimentos, bebidas y tabacos –excepto agropecuarios–, así como los servicios de vivienda y educación. La inflación no subyacente, integrada por los costos de los productos agropecuarios y tarifas energéticas, disminuyó 0.69% y se colocó a una tasa anual de 8.39%. Respecto del índice de precios de la canasta básica de consumo, presentó un aumento mensual de 0.17% en el sexto mes de 2013, con lo que su tasa anual se situó en 5.56% (en junio de 2012 las cifras correspondientes fueron de 0.25 y 5.81 por ciento, respectivamente). De acuerdo con analistas de Banamex Citigroup, el aumento menor a lo esperado en los precios de las mercancías y de algunas tarifas de servicios relacionados con el turismo aún no muestra totalmente el impacto de la reciente depreciación cambiaria. Por otro lado, la demanda interna sigue siendo débil, a la vez que persiste la intensa competencia en las cadenas comerciales al menudeo. Ambos factores continuarán presionando a la baja los precios en los próximos meses.