CIUDAD DE MÉXICO (apro).— La espiral de incertidumbre que ha dejado la propagación del coronavirus, combinada con la caída de los precios internacionales del petróleo, dejaron otro día de oscuridad en los mercados financieros, donde el tipo de cambio se desplomó a un nivel récord, mientras que la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) acumuló su segundo día consecutivo en caída libre. En ventanillas bancarias, el billete verde se cotizó en 23.94 pesos, mientras que a nivel interbancario se ofertó en 23.93 unidades, es decir, 3.2% más caro que el cierre del pasado martes, de acuerdo con información del Banco de México (Banxico). Por su parte, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) tuvo un retroceso del 3.61% con una disminución de mil 331 unidades, en línea con Wall Street donde el Dow Jones tuvo una variación a la baja del 6.30%; el Standard & Poor’s 500, 5.18%; y el tecnológico Nasdaq, 4.70%.

Impacto en divisas

Este “miércoles negro” fue provocado por la caída severa en los precios del petróleo. En la sesión, el WTI cerró con una pérdida de 16.59%, después de tocar un mínimo en la sesión de 20.06 dólares por barril, nivel no visto desde febrero del 2002. En el mismo sentido, la Mezcla Mexicana de Exportación se espera que ronde los 15 dólares por barril. “Los menores precios del petróleo se traducen en un peor desempeño de divisas de países productores de materias primas, siendo el peso mexicano la segunda peor divisa con peor desempeño entre los principales cruces del dólar después de la corona noruega, que se depreció en 7.19%”, explicó el análisis del Banco Base. De esta forma, la prima de los CDS (Credit Default Swap) de los bonos a cinco años de Pemex tocó un máximo histórico de 643.41 puntos base en la sesión, superando los niveles de la Crisis Financiera del 2008. La prima de los CDS de las emisiones de México, a 5 años y en dólares, tocó un máximo de 283.3 puntos base, no visto desde 2009, aunque aun significativamente por debajo del máximo histórico de 587.5 puntos base alcanzado en el 2008.

Anticipan recorte

Al respecto, el análisis acotó que “lo anterior implica que el riesgo que percibe el mercado está más cargado hacia Pemex, por la probabilidad de un recorte en la calificación crediticia, en donde preocupa que una segunda agencia calificadora la sitúe por debajo del grado de inversión. Si otra agencia recorta la calificación de Pemex a grado especulativo, se podría dar una venta masiva de la deuda de esta empresa en el mercado secundario”. Asimismo, aumentó la percepción de riesgo en los mercados financieros globales, relacionada con la pandemia del coronavirus, que al día de hoy ha infectado más de 216 mil personas en el mundo y más de 135 mil fuera de China. Así las cosas, ni la subasta realizada por el Banxico por un monto de dos mil millones de dólares con el objetivo de propiciar mejores condiciones de liquidez, un mejor descubrimiento de precios y un funcionamiento ordenado del mercado de cambios, pudo frenar al peor día del peso en su historia.