Guerrero, primer lugar en producción de drogas
* La siembra de marihuana y de amapola, en aumento
* La región de la Montaña, la zona de más alta incidencia
Acapulco, Gro , 19 de noviembre (apro)- El estado de Guerrero se mantiene como el primer productor de enervantes en el país Este año la producción de marihuana aumentó 31 por ciento, mientras que la de amapola lo hizo en 10 puntos porcentuales
De acuerdo con un reporte presentado por el general brigadier Mario López Gutiérrez, comandante de la Novena Región Militar, con sede en Chilpancingo, la Montaña guerrerense sigue siendo la región de mayor producción de narcóticos en México, incremento que se observó en el último año
Ante reporteros, el oficial militar indicó que del 1 de enero al 18 de noviembre de este año, el Ejército quemó 44 mil 45 plantíos de marihuana, en 4 mil 908 hectáreas, en tanto que destruyó 112 mil 928 sembradíos de amapola, en una superficie de 8 mil 529 hectáreas
En este año, dijo López Gutiérrez, se incautaron 832 kilos de cocaína, 755 de heroína, 140 mi l65 kilos de goma de opio, 60 mil 13 toneladas de marihuana, 295 mil 73 kilogramos de semilla de amapola y 529 mil 85 kilos de semilla de canabis
Según el comandante de la Novena Región Militar, el Ejército en Guerrero puso a disposición del Ministerio Público a 238 personas, 188 armas de diferentes calibres, 2 mil 51 cartuchos, 153 cargadores, 91 vehículos que transportaban droga y se ubicaron cinco pistas clandestinas, que fueron destruidas
El militar reconoció que la pobreza extrema en la región de la Montaña y en la sierra obliga a familias enteras a dedicarse a la siembra y cosecha de enervantes
De hecho, hay versiones de campesinos de estas regiones de que por los bajos precios de cultivos tradicionales como el maíz, café y frijol, no tienen más alternativa que trabajar de peones de dueños de predios que los destinan a la siembra de marihuana o amapola, en tanto los menores y las mujeres cosechan la hierba o recolectan la goma de opio, base para la fabricación de heroína
Testimonios de campesinos de la sierra, hablan de que el trabajo que realizan durante un mes en los cultivos de enervantes, equivalen en paga a seis meses en la siembra de maíz, de ahí que para sobrevivir miles de campesinos acepten trabajar para narcotraficantes
Los riesgos, no obstante son mayúsculos
Cálculos del Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, hablan de que por lo menos 50 por ciento de indígenas detenidos en las cárceles de Guerrero están procesados por delitos contra la salud, en la modalidad de acopio y siembra de enervantes Son los peones que recurrieron a esta actividad por la crisis