México, D F (apro)- Priistas y panistas involucrados en el escándalo sobre el trasiego de recursos ilegales a la campaña de Vicente Fox, que con la captura de Eduardo Fernández esboza un torneo de acusaciones sobre quiénes han cometido más ilegalidades para conseguir votos, apuestan a que los mexicanos olviden que ambos se coludieron para heredar al país la pesada carga del rescate bancario Pero hay que insistir en recordarlo: Con el colapso económico encima, producto de la herencia de Carlos Salinas y su propia incompetencia, Ernesto Zedillo instrumentó un rescate bancario inconstitucional e ilegal que el PAN, a instancias de Fox y camino ya hacia la candidatura presidencial, convalidó en la Cámara de Diputados junto con la bancada priista Eduardo Fernández, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, fue el personaje clave en todo este circuito de complicidades que convalidaron los diputados panistas que encabezaba Carlos Medina Plascencia, el exgobernador interino de Guanajuato que ahora dice haber sido chantajeado por aquél El saldo del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa): Una herencia de aproximadamente cien mil millones de dólares que los ciudadanos mexicanos estamos pagando desde el 12 de diciembre de 1998, cuando priistas y panistas sellaron en la Cámara de Diputados el contubernio con el gobierno de Zedillo Fernández, sujeto ahora a proceso entre otros cargos por presuntamente haber filtrado al PRI la maraña de transferencias de dinero a la campaña de Fox mediante Lino Korrodi y sus secuaces, fue el mismo personaje que aprobó como presidente del Subcomité de Recuperación del Fobaproa beneficiosas negociaciones a personajes de la banca, la industria y la política Este “tipo”, como llamó Fox a Fernández, fue clave en las negociaciones que siguieron a la propuesta de Zedillo a la Cámara de Diputados, en febrero de 1998, de aprobar los 552,000 millones de pesos que acumulaba a esa fecha el costo del rescate bancario instrumentado por su gobierno mediante la suscripción de pagarés sin ningún respaldo constitucional ni jurídico De marzo a noviembre de ese año, el encono fue creciente entre la oposición y el gobierno priista, pero pronto el PAN se desdijo de su posición de no avalar el atraco y de dejar impunes a Ortiz y Fernández, cuya remoción puso como condición Medina Plascencia para aprobar el Fobaproa, tal como lo declaró la víspera al semanario “Proceso” El ablandamiento de los panistas se produjo luego de que Fox apareció en televisión, en horario estelar, para decir que era preciso aprobar el rescate bancario El 12 de diciembre, en efecto, la mayoría integrada por el PRI y el PAN aprobó sustituir el Fobaproa por el Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB), un organismo propuesto por los panistas y que a la fecha no ha sido capaz de aminorar la pesada carga del rescate bancario, definido por el perredista Andrés Manuel López Obrador como el mayor atraco en la historia de México La razón por la que los panistas se olvidaron de sancionar a quienes acusaron de actuar contra la Constitución y los intereses de los mexicanos es muy sencilla: Muchos de ellos fueron beneficiados por el propio Fobaproa, entre ellos empresas del propio Fox, de Medina Plascencia y de las que el senador Fauzi Hamdan asesora en su doble condición de abogado y legislador, cuyos casos están debidamente documentados por “Proceso” Ahora resulta que Fernández trató de chantajear al PAN para que aprobara el Fobaproa, según declaró el miércoles Medina Plascencia, el personaje que se mantuvo cuatro años al frente del gobierno de Guanajuato sin que nadie hubiera votado por él, salvo Salinas, Fox y Diego Fernández de Cevallos En realidad, la captura de Eduardo Fernández obedece a que rompió el pacto de silencio ante su inminente aprehensión por haber sido él quien filtró al priista Enrique Jackson la información del trasiego de recursos ilegales a la campaña de Fox, a través de Lino Korrodi, y que se hizo público un mes antes de las elecciones del 2 de julio El destape de estas ilegalidades cometidas por los “Amigos de Fox” en el contrabando de recursos a la campaña, que el propio Korrodi no ha negado, ha confrontado otra vez a los mismos que se coludieron para convalidar el Fobaproa, que sólo por los intereses que genera anualmente representa unos 30 mil millones de pesos Se trata se una confrontación entre los mismos cómplices, aunque de distinto color partidista Comentarios: delgado@procesocommx 27/02/03