México, D F (apro)- El Banco Mundial donó a la UNAM 500 mil dólares del Fondo de Desarrollo Institucional (FDI), para la creación de un “Laboratorio de documentación y análisis sobre la corrupción”, con el fin de conformar la metodología y medir las condiciones que propician éste fenómeno en México y América Latina En el laboratorio, que operará en el Instituto de Investigaciones Sociales(IIS) de la UNAM, se realizará --en la segunda mitad del año-- una encuesta a funcionarios y proveedores de 22 secretarías de Estado y organismos paraestatales, para medir la tolerancia a la corrupción, los valores, el apego a la ley y la transparencia en los procesos de adquisiciones de productos y servicios En el laboratorio también se elaborarán bases de datos con información acerca de las investigaciones realizadas en otras partes del mundo sobre el tema, así como el financiamiento de tesis de licenciatura, maestría y doctorado relativas al análisis de éste fenómeno El director del IIS, René Millán dijo que el laboratorio “es resultado de un esfuerzo académico de la UNAM para analizar y realizar una labor que trascienda en todo el territorio de América Latina respecto a uno de los grandes problemas de la región: la corrupción” Explicó que el donativo “permite tener fondos para financiar la mayoría de las actividades del laboratorio, el cual ha contado para su formación con otras donaciones de personalidades e instituciones interesadas en promover los estudios sobre el tema, incluido el sector privado” Por su parte, el investigador Antonio Azuela de la Cueva, quien coordinará el laboratorio, señaló que “la corrupción tiene en sí misma un carácter secreto, por lo que el trabajo académico se enfocará a realizar mediciones indirectas, a través de metodología en ese sentido” Según Azuela, “se dice que los Estados llegan a incurrir en costos de hasta 30 por ciento más del valor de los objetos por causas de corrupción Esta es una cifra promedio mundial, que no es el punto de partida del laboratorio” La investigadora Julia Flores explicó, por su parte, que “el laboratorio no medirá hechos individuales de corrupción, porque se trata de una investigación social, no policiaca”, pues esas funciones corresponden a otras dependencias, como la Secretaría de la Contraloría o la Procuraduría General de la República “Nosotros vamos a acercarnos a los actos de corrupción, a medir la disposición o tolerancia hacia ellos por parte de funcionarios o empleados, pero estos estudios son percepciones, a través de indicadores”, añadió Azuela y Flores explicaron que en la actualidad “se trabaja en el diseño de la metodología, porque la diferencia entre el conocimiento de las ciencias sociales y el sentido común, es el método” Azuela dijo que “la labor de las ciencias sociales es desarrollar indicadores, lo que permitirá hacer un ranking por secretarías, con el fin de saber dónde se registran mayores condiciones relacionadas con problemas de corrupción” Informó que en el laboratorio trabajarán 18 miembros de la Unidad de Estudios de Opinión del mismo Instituto, y que se licitará el levantamiento de una encuesta para que participen empresas especializadas Por su parte, la gerente de Contrataciones y Licitaciones de la Oficina del Banco Mundial para Colombia y México, Lea Braslansky indicó que el laboratorio “será un mecanismo que apoyará al gobierno de México en su lucha contra la corrupción”, al afirmar que “lo que le interesa al organismo es la metodología” Braslansky habló de la preocupación del Banco Mundial por los recursos que se desvían de manera ilegal, mismos que podrían utilizarse en el combate a la pobreza Y sin precisar cifras sobre la corrupción, dijo que “se trata de una cantidad muy grande de dinero que se dedica a caminos paralelos y no a dicho combate” Añadió que la misión del organismo que representa es precisamente reducir la pobreza en el mundo La funcionaria del BM dijo que el donativo de 500 mil dólares se realizó a través del gobierno mexicano, específicamente de la Secretaría de Hacienda 03/03/03