MEXICO, D F, 2 de marzo (apro)- Los arzobispos de Puebla y León, Víctor Sánchez Espinosa, y José Guadalupe Martín Rábago, respectivamente, refrendaron su convicción de mantener "tolerancia cero" con los sacerdotes pederastas y negaron ser "tapadera" de ese tipo de perversiones
        "Mis sacerdotes me conocen y ellos saben mi manera de actuar; saben que una actitud de ese tipo, lamentable y triste, no la toleraría", dijo Sánchez Espinosa, recién nombrado prelado poblano
         En entrevista concedida a la agencia Notimex,  Sánchez Espinosa señaló que, cuando se comprueba un caso de pederastia en el clero, la Iglesia actúa a través de un juicio canónico y da la libertad a la parte acusadora para que presente una denuncia penal
         Añadió: "En estos casos no es lo más recomendable hacer tapaderas Un caso así debería derivar en que la persona deje el seminario porque haría mucho daño a la Iglesia y a él mismo"
           Por su parte, Martín Rábago afirmó que en ese campo, "sumamente delicado, la propuesta debe ser muy clara: tolerancia cero, no como una especie de venganza ni caza de brujas"
         Dijo: "Debemos tomar en cuenta que cuando los niños o adolescentes quedan marcados por una conducta de este tipo, es muy grave el daño en su contra"
         Añadió que es urgente evitar estos problemas desde la formación de los ministros de culto católicos, y pidió inclusive contratar psicólogos como auxiliares en los seminarios
          A su juicio, los jóvenes aspirantes al sacerdocio son "hijos de su tiempo", por lo que traen las características negativas y positivas del mundo moderno
         Sostuvo que ellos sufren de cierta "fragilidad psicológica" que los vuelve incapaces de continuar con un propósito prolongado y persistente
        Añadió que también tienen problemas desde el punto de vista afectivo, debido al quebranto de sus familias, "ya que muchos llegan a los seminarios marcados por experiencias familiares carentes de integración, lo que les dificulta entablar relaciones más profundas"
         Como parte de los "defectos" de los aspirantes a seminaristas, el prelado se refirió al apego y la búsqueda de seguridad personal en los bienes materiales o la dificultad en percibir al sacerdocio como un servicio para toda la vida
         Por ello, el exrector del seminario mexicano de Guadalajara, uno de los más grandes de América Latina, subrayó la necesidad de acudir a la psicología para comprender y conocer mejor la situación de los jóvenes en las casas de formación
        "Sería una ilusión decir que los candidatos al sacerdocio no puedan tener algún tipo de tendencia a la perversión, conocida o no por la persona Se han dado casos y estamos dispuestos a evitar que vuelvan a suceder", añadió