MÉXICO, DF, 6 de julio (apro) - La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y la Arquidiócesis de México deslindó al presidente Felipe Calderón de la debacle electoral sufrida por el PAN en la jornada electoral de ayer
         Según la jerarquía católica, la derrota electoral que registró el PAN no implicó una desaprobación ciudadana al gobierno de Calderón, sino al sistema político mexicano "que está agotado y no se ha renovado"
El presidente y el secretario general del Episcopado, Carlos Aguiar Retes y Leopoldo González, consideraron que ahora comienza una nueva etapa donde la ciudadanía deberá vigilar las acciones de sus representantes, y los partidos evaluar si, en su "obsesiva reconquista del poder", el abandono de sus responsabilidades sociales "podría conducir al hastío, la desconfianza, el rencor de los electores o a su indiferencia"
         La CEM advirtió la necesidad de que partidos políticos y organismos electorales hagan una reflexión seria y profunda sobre el alto porcentaje de "voto nulo" y de abstencionismo registrados en los pasados comicios
         Los jerarcas católicos aseguraron que el voto nulo y el abstencionismo fueron expresiones de insatisfacción de muchos ciudadanos ante el tema político y las organizaciones que lo secundan
         Precisaron que luego de los comicios "no debe haber entre los ciudadanos vencedores ni vencidos, pues todos somos México, todos queremos el bien y el progreso del país"
         Por ello, exhortaron a los participantes en esta contienda electoral a "superar sentimientos y pasiones partidistas, aceptar los resultados oficiales y disponernos a colaborar en la nueva configuración política"
         Una vez que pasaron las elecciones intermedias, dijeron que otro factor que abonará a la madurez y crecimiento en la democracia será el conformar gobiernos incluyentes, capaces de dialogar y asumir las propuestas de las distintas fuerzas políticas