Policías federales matan en retén a un hombre y hieren a mujer embarazada
CUERNAVACA, Mor., 29 de octubre (apro).- Una persona murió y otras tres resultaron heridas, entre éstas un menor y una mujer embarazada, luego de que la policía federal abrió fuego contra una camioneta pick up, cuyo conductor no se detuvo en un retén que instalaron sobre la carretera Cuautla-Valle de Chalco, a la altura del crucero de Yecapixtla.
Hasta el momento, los agentes federales destacamentados en el municipio de Cuautla, fueron acuartelados en las instalaciones de la Policía Federal, en tanto se desarrollan las investigaciones respecto de su probable responsabilidad en los hechos.
Los agentes federales montaron el operativo, luego de que en Yecapixtla dio inicio la feria de ese lugar y se realizó un baile con “La Arrolladora Banda Limón”. Al término del evento, los agentes comenzaron a realizar las revisiones. Sin embargo, al momento de solicitar a la camioneta el alto total, ésta aceleró y los policías accionaron sus armas.
Una de las versiones aún no confirmadas, es que hubo fuego cruzado entre los agentes federales y los ocupantes de la camioneta, hecho en el que un federal resultó herido de un hombro. Este se encuentra en un hospital, mientras que la mujer embarazada y el menor son atendidos en el hospital general de Cuautla.
El subprocurador de Justicia de la zona oriente, Juan Carlos Fontes Jordán, informó que, de las primeras investigaciones, no se ha comprobado que los tripulantes de los autos baleados hayan portado armas de fuego.
El hombre que resultó muerto por un disparo en la cabeza fue identificado como Esteban Román Moss Nava, de 22 años, vecino del poblado de San Sebastián, municipio de Totolapan, en los altos de Morelos.
Moss Nava viajaba como copiloto en el auto Ford, tipo Focus, color azul, placas MEF1144 del estado de México, mientras que el conductor Marco Antonio Chávez, de 24 años, también residente en Totolapan, resultó herido.
En tanto, en el municipio de Emiliano Zapata, dos hombres fueron ejecutados y arrojados en las faldas del cerro donde inicia la sierra de Montenegro.
El hallazgo se produjo poco después de la media noche. Las víctimas presentaban huellas de tortura. Fueron encontradas maniatados y cubiertas el rostro con cinta canela.