Dice Larrazabal no tener miedo; PAN define su futuro el miércoles
MÉXICO, D.F. (apro).- Después de dar a conocer su decisión de permanecer en el cargo, el alcalde de Monterrey, Fernando Larrazabal Bretón, dijo sentirse tranquilo y sin temor a un posible proceso de expulsión de parte de su partido por desacatar un exhorto del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PAN.
Larrazabal aprovechó la inauguración de un complejo deportivo en el sector de la Alianza, al poniente de Monterrey, para darse un “baño de pueblo”, donde con algunas pancartas y un grito de “¡Sí!”, los habitantes del sector mostraron su apoyo al edil cuando éste les preguntó “¿Están de acuerdo con mi decisión?”.
En entrevista, el alcalde fue cuestionado sobre la posibilidad de que se le inicie un proceso de expulsión, tras desacatar la orden del CEN albiazul, por supuestos actos de corrupción de su hermano, a lo que el alcalde respondió no tener miedo. “No tengo ningún temor y la decisión que tome mi partido, mi institución, la habré de respetar, yo tengo mi conciencia tranquila de que actúe conforme a la ley y el gobierno que yo encabezo en todo momento ha actuado apegado a derecho”.
La coordinación local del PAN se deslindó de la administración de Monterrey, hasta que no se aclare el caso del hermano del edil Jonás Larrazabal al que se le vio in fraganti recibiendo dinero en diversos casinos de la ciudad y el de Miguel Ángel García Domínguez, secretario de Desarrollo Humano y Social con licencia.
El próximo miércoles la cúpula panista analizará el caso del alcalde y determinará qué medidas aplicar.
Este domingo el periódico El Universal dio a conocer que el presidente del partido, Gustavo Madero, sugiere la expulsión del edil como castigo por ignorar la sugerencia de los dirigentes nacionales para que solicitara licencia por 30 días al cargo.