Amedi y Joaquín Vargas, en contra de fusión Televisa-Iusacell
MÉXICO, D.F. (apro).- La Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi), así como el empresario Joaquín Vargas, concesionario de MVS, deploraron las presiones de Televisa y TV Azteca contra la Comisión Federal de Competencia (CFC), en vísperas de que el organismo antimonopolios autorice o rechace la alianza de ambas empresas, a través de Grupo Iusacell, propiedad de Ricardo Salinas Pliego.
En conferencia de prensa, representantes de la Amedi advirtieron que si se aprueba la fusión Televisa-Iusacell representaría “la mayor concentración de recursos comunicacionales en la historia” del país” y amenazará la posibilidad de competencia en el terreno de la televisión abierta y el triple play.
Aleida Calleja, presidenta de la Amedi, anunció el inicio de una campaña para que la CFC no apruebe la inversión de Televisa por 1 mil 600 millones de dólares en Iusacell, anunciada desde abril del 2011.
Con ésta y otras acciones se pretende contrarrestar a “las presiones y cabildeos que ejercen ambas televisoras” en contra de los cinco integrantes de la CFC.
A través de su cuenta de Twitter, el presidente de MVS Comunicaciones, Joaquín Vargas, deploró las presiones de Televisa y de TV Azteca en contra del organismo que preside Eduaro Pérez Motta.
“Obvia y burda la presión de Televisa sobre Eduardo Pérez Motta, de la CFC”, advirtió Vargas Guajardo, accionista de Dish, la señal de televisión satelital que ha representado una dura competencia para Sky, filial de Televisa.
Se prevé que el próximo martes 24 de enero, la CFC decidirá si autoriza o no la concentración entre Televisa y Grupo Iusacell.