MÉXICO, D.F. (apro).- El retiro de la estatua del expresidente de Azerbaiyán, Heydar Aliyev, del parque de La Amistad ubicado en la primera sección del Bosque de Chapultepec tuvo un alto costo diplomático y económico para el país: una fisura en las relaciones entre ambos países y el retiro de una inversión de 3.8 mil mdd de dólares por parte del gobierno de ese país. Así lo dio a conocer hoy el embajador azerí llgar Mukhtarov en la Universidad Iberoamericana, donde dictó una conferencia sobre el florecimiento económico y social de la República de Azerbaiyán, gracias a los recursos derivados de la explotación del petróleo y el gas. Según el diplomático, las autoridades de su país planeaban invertir en México 3.8 billones de dólares en la construcción de refinerías y espacios, entre otros proyectos. Sin embargo, explicó que a raíz de que el gobierno del Distrito Federal (GDF) decidió quitar la estatua de Aliyev, “todos esos fondos se encuentran congelados”. La estatua del exmandatario Aliyev fue donada por el gobierno de Azerbaiyán. El entonces jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard, decidió que el mejor sitio para colocarla era el Parque de La Amistad. Sin embargo, la decisión fue severamente cuestionada por los vecinos por el pasado del presidente azerí, involucrado en la matanza de opositores a su gobierno. La protesta social la heredó Miguel Ángel Mancera, quien puso fin al problema quitando la estatua. En la conferencia, Mukhtarov aseguró que el controvertido líder político Heydar Aliyev -quien fuera oficial de la KGB, la policía secreta en la era soviética-, y cuya estatua fue retirada en enero del presente año, “no era un dictador”, pues abolió la pena de muerte e impulsó políticas que hicieron despegar la economía de Azerbaiyán. Relató que la República de Azerbaiyán se interesó en la rehabilitación de espacios públicos de la ciudad de México, la primera ciudad latinoamericana que contaba con una embajada de aquel país, por lo que se propuso a Ebrard el financiamiento para la restauración de la Plaza Tlaxcoaque y el Parque de la Amistad en Chapultepec, donde se colocaría la estatua. “Invertimos casi diez millones de dólares en este regalo a la ciudad. Ayudábamos con los parques y no esperábamos nada a cambio”, lamentó el embajador sobre la acción que fue considerada por el gobierno capitalino como “la más grande inversión proveniente del exterior en materia de recuperación del espacio público”. La estatua fue retirada luego del dictamen ejercido por una comisión que preparó el GDF, tras la denuncia de algunos grupos defensores de derechos humanos, quienes señalaron que Aliyev había sido un represor, así como por las críticas de personajes como el reconocido poeta Homero Aridjis y el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, José Sarukhán, quien es de origen armenio. "El problema no es sólo entre un gobierno local y una embajada, sino entre dos países”, afirmó Ilgar Mukhtarov, quien aseguró que su país aún desea invertir en México, en un futuro. El diplomático recordó también que las relaciones diplomáticas entre México y Azerbaiyán comenzaron en 1982, con la visita de Aliyev a México durante la presidencia de José López Portillo. La estatua fue reubicada en una casa de la Colonia Lomas de Chapultepec, pero, según Mukhtarov, el conflicto diplomático no se ha resuelto del todo.