MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- El expresidente Felipe Calderón dijo anoche en Saltillo, Coahuila que “quiere portarse bien como expresidente y no andar dando lata”, además de que desea que a México y al gobierno les vaya bien. Durante su participación en el Sexto Congreso Loud, organizado por el Tecnológico de Monterrey campus Saltillo, el exmandatario se quejó de que durante su gobierno el Congreso le bateó muchas de sus propuestas para reformar el sector energético. Señaló que él planteó que se permitiera a Pemex coinversión con empresas de calidad en México además que la iniciativa privada pudiera hacer refinerías, ductos de gasolina y petroquímicas. Agregó que varias de las propuestas sobre la reforma energética que realiza Enrique Peña Nieto en su momento él las hizo. “Yo buscaba un touchdown pero conseguí un primero y diez”, afirmó el exmandatario. Sin embargo, confió en que con un Congreso más dispuesto y una oposición más responsable, el desarrollo del país avance. Dijo que su administración enfrentó dos grandes problemas, principalmente en la cuestión económica y la inseguridad pública. Calderón destacó que los momentos más duros de su gobierno fueron la recesión del 2009 y la epidemia de influenza, además del combate a la delincuencia organizada. Durante su conferencia Retos de la Presidencia de México que dictó en el auditorio del Parque Maravillas, consideró que la falta de un Estado de Derecho, de legalidad y de incentivos correctos impiden que México crezca. Ante unos 2 mil 500 asistentes, dijo que con la estrategia antinarco que impuso en su sexenio pretendía preservar la seguridad de las familias mexicanas y el Estado de Derecho. Afirmó que el narco intentó apoderarse del Estado infiltrándose en las corporaciones policiacas. Explicó que a través de un combate directo se implementaron acciones para contener a la delincuencia organizada. “Los países que pueden lograr que la ley se cumpla, que haya incentivos correctos y que al que cumpla la ley le vaya bien y al que la viola le vaya mal, esos son los que avanzan”, indicó Calderón. Respecto a la reforma hacendaria, dijo que lo que tiene que gravarse más uniformemente es el consumo, no el ingreso de los contribuyentes.