COLIMA, Col. (apro).- El auditor superior del estado, Carlos Armando Zamora González, anunció que prepara denuncias penales en los ámbitos federal y estatal contra el exgobernador Mario Anguiano Moreno, señalado como responsable del desvío de alrededor de 2 mil millones de pesos durante su gestión que abarcó del 1 de enero de 2013 al 31 de agosto de 2015. En una reunión de trabajo, el titular del Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental (Osafig) explicó a los diputados locales los resultados de la auditoría excepcional practicada a la anterior administración estatal, de la que se determinaron irregularidades en diversas partidas, entre ellas servicios personales, adquisiciones y donaciones. Cuestionado por legisladores de distintas fracciones, Zamora González expuso que tras la revisión de las cuentas de la administración de Mario Anguiano, se detectó “un patrón semejante, donde se falsea información contable para poder acreditar operaciones que no son correctas”. En una de las principales anomalías reportadas en su informe de auditoría, el Osafig acreditó plenamente que el Poder Ejecutivo de Colima, en los ejercicios fiscales 2013 y 2014, generó un déficit de mil 867 millones 696 mil 154 pesos en la partida de servicios personales, “falseando información contable respecto al origen, registro y veracidad de los movimientos contables”. Así también, el organismo fiscalizador detectó “la simulación de registros contables para el ocultamiento del pago de nómina no presupuestada, incrementando indebidamente con las reclasificaciones observadas, conceptos de infraestructura y obra pública que no fue real ni ejecutada”. Entre otras anomalías detectadas, el Osafig reportó la presunta simulación de reintegros a fondos federales de los ejercicios fiscales 2014, 2013 y anteriores; la desaparición de asfalto y combustibles donados por Petróleos Mexicanos, por un valor superior a 38 millones de pesos, de los que una parte fueron a parar a dos gasolineras del exsecretario general de Gobierno Rafael Gutiérrez Villalobos; y el derroche millonario de recursos del Despacho del Gobernador en gastos no autorizados como viajes de familiares del mandatario, regalos, alcohol, restaurantes, hospedaje, etcétera. En su encuentro con los legisladores, Zamora González les hizo notar que la actual auditoría excepcional constituye “un ejercicio inédito”, sobre todo porque las cuentas públicas de 2013 y 2014 ya habían sido revisadas y aprobadas por la anterior legislatura y un órgano fiscalizador que en su momento “no encontró nada”. El titular del Osafig consideró que tendría que hacerse un análisis de esa circunstancia, porque “evidentemente hay una anarquía en estos patrones, una anarquía donde antes no sucedía nada, no se observaban algunas cosas o no se profundizaba en cosas donde debía profundizarse, que generaron una dinámica de tolerancia y de confianza porque se había estado haciendo así”. En los últimos meses, el organismo fiscalizador ya había procedido penalmente contra Anguiano por el presunto mal manejo de un crédito de 638 millones de pesos, pero hasta la fecha la Procuraduría General de Justicia del Estado no ha dado a conocer avances de las investigaciones.