CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Secretaría de Educación Pública (SEP) respondió a las críticas que le hizo la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF) en repudió la "falta de consulta" en los contenidos en materia de educación sexual de los libros de Biología de primer año de secundaria. En un mensaje oficial, la dependencia a cargo de Otto Granados Roldán contestó que la Autoridad Educativa Federal es la única responsable de elaborar, mantener actualizados y editar los libros de texto de las escuelas públicas. Enfatizó que para las escuelas secundarias existe un catálogo de 17 libros de Biología que los profesores pueden escoger, según las necesidades de su grupo. Además, se defendió de las acusaciones de la organización, con relación a que los materiales "carecen de datos científicos" y a que los contenidos son "ideológicos". Por el contrario, aseguró que cada uno de los materiales fue evaluado por grupo de 156 maestros, pedagogos, académicos y especialistas, quienes dictaminaron favorablemente 17 de 31 libros de Biología, según el acuerdo 18/12/17. En total, explicó la Secretaría, de 228 libros de secundaria que casas editoriales propusieron a la SEP tras una convocatoria pública, al final sólo 113 se dictaminaron favorablemente. La SEP subrayó que los contenidos que causaron el descontento de la organización ultraderechista tienen el objetivo de “ofrecer educación sexual a los jóvenes” y asegurar que tengan una perspectiva de salud sexual, reproductiva y de derechos humanos, así como que cumplan con los compromisos internacionales a los que se ha suscrito México. “Evitando los miedos, culpas, falsas creencias, coerción, discriminación y violencia. Para tales efectos, se debe aportar información suficiente y adecuada que oriente a los adolescentes”, se lee en su comunicado. Por la mañana, el presidente de la UNPF, Leonardo García Camarena, emitió un fuerte mensaje contra la SEP en el que repudió los contenidos de educación sexual de los libros de Biología de primero de secundaria al considerarlos “dictatoriales”, con “carga ideológica” e “inadecuados” para los adolescentes. Incluso, advirtió a la SEP que la organización no se quedaría de “brazos cruzados” y exigió la participación de la Unión de Padres en la selección de los libros.