CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- La empresa de seguridad Corporativo Direccional Navi, antes Ayax, negó haber recomendado al escolta Sergio González Ibarra a Alberto Sentíes Palacio, conocido como #LordFerrari, como aseguró este último. En días pasados, tuvo difusión un video que muestra la agresión a un conductor que circulaba en una camioneta Duster blanca por la calzada de Tlalpan, cuando otro auto blanco –que escoltaba a un Ferrari rojo– se le atravesó y uno de sus ocupantes se acercó a la ventanilla, forcejeó con el conductor hasta abrir la puerta y a jalones lo sacó y lo llevó hasta la pared, donde lo golpeó brutalmente. Ahora se sabe que el golpeador es Sergio González Ibarra, escolta de Alberto Sentíes Palacio y que ayer fue hallado muerto en un hotel del Estado de México. Luego del incidente en Tlalpan, Sentíes declaró que contrató a González en enero de este año a través de Alfonso Zamorano, representante de la empresa Ayax, la cual brinda sus servicios al fraccionamiento donde vive. Sin embargo, Enrique Padrés, representante legal de la empresa de seguridad, dijo a Reforma que Sentíes sí tuvo un acercamiento con ellos para contratar el servicio de guardaespaldas, pero que nunca firmó contrato, debido a que no se llegó a un acuerdo. "Entramos en negociaciones con él hace 8 meses, nos quiso contratar, pero quería coche de guaruras con armas largas y nosotros le dijimos que no era necesario, que la mejor protección que puede tener es discreción aquí en México", expresó. Sostuvo que al no estar convencido de lo que recomendaban, Sentíes no contrató los servicios con la empresa, que dejó de usar como razón social Ayax, desde hace 6 años. "Nosotros le recomendamos dos Jetta y con personal de seguridad siguiéndolo, sí, pero sin armas, porque no era necesario, tampoco era una figura pública conocida secuestrable", agregó Padrés. "Él no quiso y ahí se acabó la negociación, nunca contratamos, nunca nos metimos con él". Aclaró que González Ibarra nunca fue empleado de Navi, y que sus clientes no hacen contratos directos con el personal de seguridad, sino con la empresa. "Este cuate (Sentíes) nomás quería coches con guaruras y pues no se los proporcionamos, no contratamos, no le entramos", señaló Padrés.