Guadalajara, Jal (apro)- Aunque una vez más reiteró hoy aquí el secretario del Trabajo, Carlos Abascal Carranza, que el gobierno de Vicente Fox no tiene el propósito de privatizar a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y que, por ende, eso no sucederá, sí afirmó que la inversión privada en el sector eléctrico es inaplazable Ante una muy nutrida concurrencia de electricistas encabezados por su líder y secretario general de la CTM, Leonardo Rodríguez Alcaine, en el 16 Consejo General Ordinario del SUTERM, Abascal Carranza declaró que "es apremiante" la participación del sector privado en la generación y distribución de electricidad para garantizar que haya energía para el futuro Luego les dijo: "La Comisión Federal de Electricidad no se privatizará", pero advirtió que, por sí sola, la CFE no podrá hacer frente a la creciente demanda en todo el país, por lo que se requiere de mayores y más oportunas inversiones Por su parte, el dirigente obrero dijo en seguida que el Sindicato Unico de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana apoya las inversiones privadas dentro del sector, "siempre y cuando no excedan del 35 por ciento Porque hay que adecuar algunas cosas que necesitamos para que la inversión privada nos ayude a resolver el problema del crecimiento eléctrico" Eso dejó satisfechos a los cientos de trabajadores de la CFE, y más cuando les informó que las finanzas del SUTERM son sanas y tienen en caja mil 475 millones de pesos, fondo que a futuro podría evitar que se cobren cuotas sindicales Pero la felicidad de los electricistas fue mayor cuando Rodríguez Alcaine les dio a conocer que 3 mil 800 trabajadores recibirán un mes de salario extra en recompensa por haber reinstalado rápido el fluido eléctrico en zonas afectadas por los huracanes Kenna en Jalisco y Nayarit, e Isidore en la península de Yucatán En otro orden, el titular del Trabajo informó que está lista y cerca la aprobación de la reforma a la Ley Federal del Trabajo, porque hay consenso entre los sectores productivos en cuanto a las principales modificaciones que se introducirían, y donde se destaca el respeto profundo a los derechos humanos, la no discriminación, el respeto a las mujeres que se embaracen y la garantía de que no serán hostigadas para dejar de laborar, y que se asegura que haya un sindicalismo democrático, libre y fuerte Abascal dio además su palabra de que las reformas no prevén el pago por horas y el aumento de la jornada laboral que rige, que es de ocho horas diarias 08/11/02