México, D F (apro)- En medio del desorden y el retraso de la secretaria de la Reforma Agraria, María Teresa Herrera Tello, dirigentes de organizaciones campesinas afectadas por resolutivos expropiatorios del pasado tomaron por asalto esta mañana la mesa del diálogo “Ordenamiento de la Propiedad Rural”, para exigir “soluciones y no más palabras” a los problemas de la tenencia de la tierra Más aún, advirtieron que de no encontrar una pronta solución a sus problemas, “empezará la derrama de sangre” Apenas la titular de la SRA, María Teresa Herrera Tello, había concluido su discurso ante dirigentes, diputados, gobernadores y campesinos, cuando el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Ovinos y Caprinos, Rafael Quezada, tomó el micrófono por la fuerza para exponer unos de “los focos rojos” de los 6 mil que aquejan al campo mexicano, según denunció la CNC Aunque personal de la Reforma Agraria intentó infructuosamente callarlo, el dirigente campesino expuso brevemente uno de los problemas limítrofes que aquejan a los estados de Zacatecas y Durango y que se encuentran sin resolver en el Tribunal Agrario desde hace un año Aprovechando la confusión, también el presidente de la Central de Organizaciones Campesinas y Populares, José Jacob Femat, secundó a Quezada y habló sobre los problemas que aquejan al campo y que, a su juicio, amenazan con un estallido social Frente a lo ocurrido, Herrera Tello palideció y optó por el silencio Y es que el discurso de la titular de la SRA enfureció a los campesinos “Sólo palabras, muchas palabras Nada de soluciones viables para el campo” Aunque la titular de la Reforma Agraria reconoció la gravedad de los problemas de la tenencia de la tierra, no aportó cifras Sin embargo, enfatizó que el país requiere de un nuevo pacto social entre el Estado y la población rural para establecer una política que resuelva de una vez por todas “los graves problemas de injusticia social que los aquejan” Sostuvo que la prioridad en este diálogo es que las propuestas sean viables, que puedan traducirse en compromisos, programas y acciones específicas que “permitan implementar una política de Estado a través de la cual se atienda integralmente al campo, con programas permanentes y de largo plazo” Más aún, dijo que la premisa indispensable para que el campo pueda emprender un desarrollo sustentable y sostenido, es que se resuelvan los conflictos que aún persisten Precisó que tales problemas no siempre responden a conflictividad agraria, pues en ellos inciden otros factores que suelen ser religiosos, étnicos, políticos, de aprovechamiento y uso de recursos naturales Herrera Tello afirmó que el gobierno del presidente Fox debe luchar por preservar la cohesión social, la convivencia armónica y pacífica, mediante el diálogo con igualdad de condiciones y oportunidades En su turno, la Confederación Nacional Campesina salió en defensa de la Secretaría de la Reforma Agraria para hacer frente a muchas voces al interior del gobierno federal que insisten en su desaparición La CNC sostuvo que la SRA, además, de conservar sus tareas actuales, para prestar un servicio cabal a los campesinos requiere refuncionarse absorbiendo todas las tareas relacionadas con la capacitación y la organización económica y financiera de los campesinos La central campesina más grande del país criticó la actitud obsesiva del gobierno del presidente Fox sobre la participación de la sociedad civil en el medio rural para dejar atrás el corporativismo La CNC sostuvo que detrás de este resabio ideológico subyacen los siguientes propósitos: la desarticulación de las centrales clasistas y su sustitución por organizaciones de la sociedad civil, la descalificación de las organizaciones campesinas y la entrega de recurso presupuestales a las organizaciones no gubernamentales Por su parte, el Congreso Agrario Permanente (CAP) apuntó que es indispensable redefinir la concepción agraria en cuanto a la tenencia de la tierra, de manera que esta concepción resulte garante de la defensa, consolidación y revalorización de la propiedad social Sostuvo que sólo este hecho se daría la revalorización del ejido y la comunidad, no sólo como forma de propiedad en abstracto, sino donde la seguridad se traduzca en la base para construir y preservar el patrimonio familiar, cuya titularidad la ostente indistintamente y con los mismos derechos y obligaciones los hombres y las mujeres del sector rural Para el CAP esta redefinición debe realizarse sobre la base de una obligada evaluación serena y objetiva de los efectos y consecuencias de la reforma al artículo 27 constitucional Por ello, demanda al gobierno federal la atención urgente de la situación jurídica de las propiedades rurales, ya que actualmente, de los más de 1035 millones de hectáreas de tierras ejidales, al menos el 40 por ciento de ellas, es decir, más de 40 millones No cuenta con títulos de propiedad En tanto, el movimiento el “Campo no aguanta más” afirmó que a más de un decenio de las reformas salinistas, sus objetivos no se cumplieron, no se remontó el problema del rezago de expedientes agrarios y la justicia agraria sigue siendo la deuda pendiente La enmienda de 1992 al artículo 27 constitucional, subrayó, canceló el reparto de la tierra, transformó la propiedad social y abrió la puerta para la reconstitución de los latifundios bajo nuevas modalidades de concentración, con lo cual, se puso fin a la reforma agraria Dijo que los nuevos agravios para los desposeídos y la acumulación de un creciente descontento social que conforma hoy en día “verdaderos focos rojos” que ponen en riesgo la gobernabilidad del país, como es el caso de Montes Azules, Los Chimalapas, La Mixteca, la Región Triqui, Los Loxichas y unos 500 conflictos más en diferentes regiones del país El movimiento “El campo no aguanta más”, sin embargo, considera que este es el momento de acudir en defensa del campo mexicano y de la soberanía nacional mediante la implementación de una política de Estado que asegure un desarrollo agrario equilibrado, incluyente, rentable, integral y sustentable, pero sobre todo, justo 18/02/03