México, D F- Las declaraciones del gobernador de Nuevo México, William Richardson, respecto a la posibilidad de un acuerdo migratorio antes de que concluya el mandato del presidente de Estados Unidos, George W Bush, son sólo “buenos deseos”, consideraron los senadores del Partido Revolucionario Institucional, Silvia Hernández Enríquez y Germán Sierra Sánchez En conferencia de prensa, la también presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores para América del Norte del Senado de la República, descartó que en breve pueda lograrse un acuerdo migratorio entre México y su vecino país del norte Sin embargo, consideró que este pendiente irá avanzando de manera gradual por medio de beneficios para sectores de inmigrantes y en distintas regiones de Estados Unidos como acuerdos particulares, como el derecho de los niños a entrar en las escuelas Puntualizó que de cara a las próximas elecciones presidenciales en esa nación –en el 2004--, el tema migratorio será un tema que inevitablemente se convertirá en herramienta electoral, pues los candidatos buscarán el voto de los hispanos, particularmente de los mexicanos que actualmente representan el 80 por ciento de la población hispana en ese país, con 388 millones de personas “Hablamos de una minoría mayor, de un grupo importante no sólo en términos políticos, sino económicos El mercado hispano es un mercado que compra, que aporta, que vende, que contribuye”, añadió Por su parte, Sierra Sánchez consideró que es prácticamente imposible lograr un acuerdo migratorio entre ambas naciones, por lo que deben establecerse metas a corto, mediano y largo plazo El senador priista manifestó que aunque la postura de Richardson es sólo de “buenos deseos”, se debe aplaudir y buscar que “se vaya generando una opinión en ese sentido, de tal manera que podamos lograrlo “Creo que los mexicanos deseamos todos los derechos para todos los mexicanos en Estados Unidos, pero de parte de Estados Unidos no están dispuestos a que se dé ese acuerdo integral”, lamentó La víspera, al salir de una reunión con el presidente Vicente Fox en México, el gobernador estadunidense aseguró que Washington ha cambiado su actitud respecto de la concreción de un acuerdo migratorio entre ambas naciones y confió en que éste se logrará en poco tiempo Sin embargo, pese a la insistencia de diversas instancias mexicanas, el gobierno de Estados Unidos no ha dado muestra alguna de querer negociar dicho pacto que beneficiaría a más de tres millones de mexicanos que residen de manera ilegal en territorio norteamericano Preocupado por su seguridad nacional a partir de los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, Washington cerró cualquier posibilidad de llegar a un acuerdo en este ámbito con México, pero en cambio le exigió el establecimiento de mayores y más eficaces medidas de seguridad en la amplia frontera común 24/06/03