México, D F (apro)- El líder del PRI en la Ciudad de México, Florentino Castro, optó por no dar la cara luego de la aplastante derrota electoral en el Distrito Federal Antes de darse a conocer los resultados preliminares que daban una amplia ventaja al PRD, Castro había anunciado que al cierre de las casillas ofrecería una rueda de prensa; pero nunca llegó En su lugar, estuvieron dos candidatos perdedores, Matilde Valdés y Omar Corral, quienes reconocieron que, a diferencia del panorama nacional, donde el priismo sí pintó, en la Ciudad de México no hubo avances Corral, candidato a diputado local, dijo sin tapujos, que la derrota de 2000 sigue vigente y aseguró que “el enemigo lo seguimos teniendo en casa” Los aspirantes a diputados establecieron, así mismo, que los candidatos no fueron los idóneos, como en la delegación Coyoacán, donde el PRI impuso a la actriz Silvia Pasquel Desde 1997, los priistas capitalino no han tenido ocasión de festejar, pues llevan tres elecciones al hilo que no dan color en la capital A quien no le salieron bien las cosas fue también al Instituto Electoral del Distrito Federal: Una falla técnica en el Programa de Resultados Preliminares impidió que se conocieran las tendencias a las 20:30 horas, como habían prometido los consejeros Hace tres años, en el proceso electoral de 2000, sucedió una situación similar Por cierto, el IEDF había recibido hasta el cierre de esta edición cuatro quejas: Una contra el PVEM por invitar a votar por teléfono a la población; una contra el PRD porque en la casa de campaña del candidato a jefe delegacional en Azcapotzalco se encontraron boletas electorales, y las dos últimas contra el propio IEDF por la falta de boletas para jefe delegacional en algunas casillas y porque en algunas casillas de la delegación Iztacalco, las boletas no tenían registrado el nombre del candidato a jefe delegacional del PVEM 06/07/03