VERACRUZ, Ver. (apro).- El pleno del Congreso local aprobó la reestructuración de la deuda pública por 46 mil millones de pesos que, a decir del gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, evitará el colapso financiero de Veracruz en el próximo trimestre. Con 38 votos a favor del PAN, PRD, PRI y partidos “satélites” --quienes apenas el martes pasado votaron en contra-- y tras el amago del gobernador veracruzano de que en crisis social prefería pagar salarios a médicos, maestros, policías y empleados de gobierno que a un diputado, este viernes los legisladores priistas recularon su voto en contra y, sin chistar, levantaron la mano a favor. Los 12 votos que rechazaron la medida fueron de los legisladores de Morena, quienes se mantuvieron firmes contra el dictamen de iniciativa de ley como el martes pasado. De hecho, tras la votación, sacaron mantas para fustigar que está reestructuración significa "más deuda para Veracruz". El martes pasado, desde Tlacotalpan y en reunión con reporteros de la Cuenca del Papaloapan, el líder nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador, felicitó a los 12 diputados por “no ceder” a las presiones de Yunes Linares y no ser un partido "alcahuete" y "palero". El miércoles por la noche, visiblemente irritado porque tuvo su primer revés en el Congreso local, el gobernador informó en un video que debió emitir una segunda iniciativa, incluyendo un artículo transitorio que obligara a la transparencia de todas las actividades con respecto a esta reestructuración, así como un adendum que, en el caso de existir remanentes de la reestructuración, serán destinados para infraestructura de los ayuntamientos de Veracruz. Hoy, tras la aprobación en el Congreso veracruzano, el mandatario estatal emitió un comunicado en el que dijo que la decisión permitirá sacar a Veracruz de la “severa crisis financiera” en la que se encuentra. "Mi reconocimiento a las diputadas y diputados del PAN, PRD, PRI, PVEM y del Grupo ‘Juntos por Veracruz’, por su compromiso con los ciudadanos", dijo. Ahora, explicó, la Secretaría de Finanzas y Planeación iniciará la renegociación de la deuda pública heredada de administraciones anteriores. "No se trata de contratar nuevos créditos, no es más deuda. Por el contrario, es bajar las tasas de interés y lograr un plazo más largo para el pago de esas obligaciones. El proceso se llevará a cabo con plena transparencia. Cualquier ciudadano desde su computadora podrá revisar en la página de la Secretaría de Finanzas y Planeación los avances, los compromisos que se adquieran, los ahorros que se logren y el destino de los recursos", agregó. En días pasados, Yunes Linares advirtió que de no haberse aprobado la reestructuración de la deuda pública bancaria por 45 mil millones de pesos, las finanzas de la entidad "colapsarían" en agosto, ya que no habría ni siquiera participaciones federales, pues serían retenidas por las amortizaciones e intereses del pasivo financiero que dejó la administración de Javier Duarte de Ochoa, actual prófugo de la justicia. En un videomensaje que grabó en redes sociales, aseguró que ni siquiera se tendría dinero para pagar nóminas y salario de los empleados de los tres poderes del estado.