QUERÉTARO, Qro. (apro).– Cientos de personas del pueblo de Maconí, en Cadereyta de Montes, Querétaro, caminaron más de 180 kilómetros durante cinco días para que los escuche su gobernador, el panista Mauricio Kuri González.

Se trata de las personas que a inicios de octubre fueron reprimidas por policías, e incluso algunos fueron detenidos después de alzar la voz para exigir el servicio de agua potable en esa comunidad.

“Una necesidad que todos tenemos es el agua y es un derecho que tenemos por ley y no tenemos agua de Maconí, y creo que en algunas otras comunidades y municipios también padecen lo mismo”, dijo el comisariado, Alejandro Ortiz Arteaga.

La administración de Francisco Garrido Patrón (2003-2009) impulsó el proyecto Acueducto II que consistió en el trasvase de agua de la Cuenca del Pánuco a la Cuenta Lerma Chapala, de Cadereyta a la capital de Querétaro.

"¡Kuri, entiende, el agua no se vende!"; "Ya llegó, ya está aquí, el pueblo de Maconí"; "¡El agua no se vende, se cuida y se defiende!"; "¡Todos somos Maconí!"; gritaban las personas manifestantes, quienes avanzaron por la Calzada de Los Arcos, justamente en donde está el histórico Acueducto de Querétaro.

En ese sentido, el senador de Morena Gilberto Herrera Ruiz, quien se solidarizó con los habitantes de Maconí y caminó el trayecto con los inconformes, afirmó que el gobernador de Querétaro debe entender la demanda de Maconí.

“Desde ahí se puede ver el Acueducto II y nada más ven cómo el agua se va y no tienen agua para nada, tienen que caminar cuatro horas para tener agua y el gobernador no entiende eso y es lo que debe entender, no están pidiendo más que lo mínimo justo”.

Pero desde el jueves pasado durante su conferencia semanal denominada “Contigo Informamos”, donde de manera selectiva se invita a reporteros de los medios de comunicación, el gobernador tocó brevemente el tema de Maconí.

“Aquellas personas que buscan desestabilizar a Querétaro, dividir a Querétaro, no quieren a Querétaro, esto es un tema totalmente aparte, nosotros hemos estado muy pegados a las comunidades de Maconí, no de ahorita sino desde hace tiempo”.

El gobierno de Francisco Garrido Patrón (2003-2009) ofreció obras a la comunidad y dotarlos de servicio de agua si permitían que gran parte del agua de sus manantiales fuera llevada a Querétaro, pero hubo incumplimientos.

Posteriormente, habitantes de Cadereyta le exigieron al gobierno del priista José Eduardo Calzada Rovirosa (2009-2015) que cumpliera lo prometido y aunque refrendó los compromisos con los habitantes, siguen sin contar con el agua prometida.

A inicios de octubre y mientras el actual gobernador, el panista Mauricio Kuri, ya habla de otro proyecto denominado "Acueducto III" para llevar más agua a la ciudad, los habitantes de Maconí exigieron agua, pero fueron reprimidos.

“Caminaron cinco días, más de 180 kilómetros para ser escuchados y aquí no está el gobierno del estado, eso es lo más lastimoso”, dijo Herrera Ruiz ante las oficinas del gobernador, que lucían con las puertas cerradas.

Un movimiento apartidista

Aunque caminaron con el senador de Morena Gilberto Herrera Ruiz, los integrantes de la manifestación expulsaron a dos diputados locales del mismo partido que un día antes de la llegada al destino de su caminata intentaron mezclarse en la agrupación.

En un auto con una bocina que encabezaba la protesta, los inconformes aclaraban que su movimiento no tenía ninguna liga partidista, no obstante, reconocieron el acompañamiento del senador de Morena.

Durante su mitin advirtieron que permanecerán fuera de las oficinas del gobernador hasta ser atendidos y de manera reiterada otras personas les refrendaron su apoyo al gritarles: ¡No están solos! ¡No están solos!

Tras la concentración, cayó una llovizna de unos minutos, algunas de las personas manifestantes permanecieron en la plaza y otras se refugiaron en los portales de edificaciones cercanas al Palacio de Gobierno.

Concertadores de la Secretaría de Gobierno y de la Comisión Estatal de Aguas (CEA) se acercaron a un grupo de manifestantes, quienes les entregaron su pliego petitorio.

"Aquí estamos y no nos vamos", les dijeron a los servidores públicos.

"La mesa está abierta desde hace muchas fechas y no hubo el último acuerdo, la mesa está abierta, la CEA está en disposición de seguir con los acuerdos para beneficio de Maconí y de todo Querétaro. Ahorita vamos a revisar el pliego petitorio y vamos a dar una respuesta", dijo Héctor Olvera Medina, concertador de la Comisión Estatal de Aguas, quien dijo que quizá hoy podrían darles respuesta.

Minutos después, participantes en la marcha amagaron con ir a "cerrar" el Acueducto II si no les dan una respuesta.

Con un grupo de manifestantes también platicó Salvador Villafuerte, de la oficina de la Secretaría de Gobernación en Querétaro, quien les dijo que los asuntos que le llegan al presidente de la República, relativos a Querétaro, se los canalizan para dialogar con el gobierno del estado y darles solución.