Frontón México, una huelga que todos ignoran

domingo, 17 de julio de 2016 · 10:24
La larguísima huelga en el Frontón México aún no se ha solucionado: cuenta con declaración de legalidad y aún hay trabajadores que exigen sus derechos. Pero esto no parece importarle ni a los empresarios ni al gobierno de la Ciudad de México, que ha impulsado la reapertura del centro a cualquier costo, ni al sindicato, que debería abogar por sus agremiados. Las obras de remodelación del mítico escenario van a 50% y ya se da por hecho que incluirá un casino, pese a que el permiso original no lo avala. CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- Hace dos décadas, un centenar de trabajadores se declaró en huelga, lo que paralizó el simbólico Frontón México. Exigían acabar con las violaciones al Contrato Colectivo de Trabajo por parte de la empresa Operadora de Espectáculos Real de México, S. A. de C. V., administradora del llamado palacio del jai-alai en la Ciudad de México. Después de 20 años de paro, las tensiones persisten, los intentos por llegar a una solución han sido infructuosos y los huelguistas, reducidos a un puñado, aún esperan la resolución del conflicto laboral. De hecho, la autoridad competente, la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA), calificó de “lícita” la huelga, contrario a lo manifestado por el patrón y el gremio que supuestamente defiende los intereses de los trabajadores: la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), dirigida por Isaías González Cuevas. Ahora los colaboradores del propietario del inmueble se han empeñado en divulgar a los huelguistas que el Frontón México –actualmente en remodelación– reabrirá sus puertas el próximo 20 de noviembre “pase lo que pase”, denuncian los agraviados. La huelga, sin embargo, está viva. El pasado 17 de mayo la JFCA giró una notificación al responsable de la CROC para que manifieste lo que a su derecho convenga, y le recuerda “la responsabilidad jurídica que conlleva la representación de los trabajadores, para los efectos legales a que haya lugar”. La JFCA también le advierte: “Queda apercibido que de no desahogar la vista concedida se le impondrá una multa de 511.28 pesos, que corresponde a siete veces la Unidad de Medida y Actualización. Lo anterior, con fundamento en el artículo 731 fracción I de la Ley Federal del Trabajo”. La respuesta de la CROC se conocerá esta semana. Todo esto fue publicado en el boletín oficial 112 de la JFCA el pasado 16 de junio, en respuesta al oficio turnado a la Oficialía de Partes de Asuntos Colectivos de la Junta Especial Número Catorce, del 12 de mayo (números de folio 3657 y 00164), suscrito por 10 de los trabajadores agraviados del Frontón México. En sus peticiones, los afectados solicitan que se les respeten sus derechos ante el Instituto Mexicano del Seguro Social, que les den copias del expediente y la JFCA “se pronuncie en el presente conflicto (…) respetando los derechos laborales de los trabajadores huelguistas con la finalidad de llegar a la culminación del presente conflicto laboral restituyéndonos como trabajadores nuestros respectivos derechos”. No obstante, la JFCA sólo avala los registros de cuatro de los 10 obreros inconformes: Esteban Camacho Talavera, Samuel Adame Hernández, Victorino Rivera Rodríguez y Emilio Pacheco Medina: “Son los únicos trabajadores reconocidos en la resolución de calificación de la huelga de fecha 26 de septiembre de 1997”. En febrero pasado, Proceso (2052) detalló que al menos cinco exempleados del Frontón México mantienen su lucha en demanda del pago de sus indemnizaciones. En principio, los huelguistas exigieron a Antonio Cosío, en su carácter de patrón sustituto, un pago individual de 3 millones de pesos. Empero, el monto se incrementó cuatro meses después a 5 millones de pesos, de acuerdo con la proporción del daño. En la cifra se incluyen salarios caídos y todas las prestaciones de ley. Este semanario también alertó que, sin previo aviso ni acuerdo con los huelguistas, el dueño del frontón dio inicio a la remodelación del emblemático recinto, ubicado en Plaza de la República 17, en la colonia Tabacalera de la delegación Cuauhtémoc. A solicitud de Proceso, la Dirección de Juegos y Sorteos de la Secretaría de Gobernación reconoce que el permiso otorgado a Antonio Cosío, que data de junio de 1955, “está vigente”, a pesar de los 20 años que el inmueble lleva sin funcionar. La dependencia también acepta que esta licencia no tiene fecha de vencimiento. El citado permiso, del que Proceso tiene copia, establece que se otorga para la organización de funciones públicas de frontón con apuestas, en su modalidad conocida como “cesta a punta”. Entre las condiciones están: “Primera: las temporadas anuales del juego de frontón de apuestas en el Frontón México quedarán clasificadas en dos categorías, a saber: ‘formal’ y ‘económica’. (…) Cuarta: solamente podrán hacerse apuestas por los sistemas de ‘partidos’, ‘quinielas’, ‘doble selección’, ‘mutuas’ y ‘seis colorado’.” No obstante, el proyecto del renovado Frontón México incluye la puesta en marcha de un casino dentro de las instalaciones. De acuerdo con la Dirección de Juegos y Sorteos (DJS) de la Secretaría de Gobernación, el empresario deberá tramitar la modificación de dicha concesión siempre y cuando presente todos los requisitos. Hasta ahora, el interesado no ha metido ninguna solicitud. Interés gubernamental La remodelación del inmueble art decó está amparada por el gobierno de la Ciudad de México, principal promotor del magno proyecto. La primera etapa contempla una cancha para el jai-alai con tribunas retráctiles, de tal manera que permita realizar eventos artísticos y culturales, convenciones, congresos y funciones boxísticas. También habrá un restaurante y un casino. Para apuntalar el proyecto, el titular de la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) del Gobierno de la Ciudad de México, Salomón Chertorivski, recorrió el lugar en diciembre pasado. Ahí anunció una inversión de 50 millones de dólares que, dijo, serán cubiertos por el gobierno de Miguel Ángel Mancera y la iniciativa privada. Como resultado de estas acciones promovidas por el gobierno capitalino, a través del titular de la Sedeco, el pasado 8 de abril el grupo de trabajadores huelguistas denunció a Chertorivski ante la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal. Lo acusan de violar los derechos laborales de los huelguistas y coadyuvar con el patrón para la inminente reapertura del Frontón México. Además, los exempleados responsabilizan al encargado de la Sedeco de “desconocer que existe la huelga, la cual fue declarada legalmente existente”. Chertorivski “pasó por alto nuestro derecho de huelga consagrado en nuestra Carta Magna”, reiteran los quejosos. Los huelguistas también turnaron al titular de la DJS, Luis Felipe Ganga Hernández, una petición para cancelar el permiso a Cosío, quien además es propietario del Estadio Azul y la Plaza de Toros México. En el oficio fechado el 1 de abril de este año, los afectados le recuerdan a Ganga que actualmente el recinto no funciona, derivado de la huelga que estalló el 2 de octubre de 1996, “y desde entonces hemos sido víctimas de represiones, abusos, amenazas”. Por ello, “y con fundamento en los derechos constitucionales contemplados en los artículos 8, 9 y 123 venimos a solicitar su intervención para salvaguardar nuestra integridad y seguridad. “Lo anterior, toda vez que al otorgar dicha concesión ésta no debe contravenir el derecho constitucional que nos asiste al estar en huelga, declarada lícita y legalmente existente por la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, radicada en la Junta Catorce bajo el expediente III-3828/96.” En el oficio, que obra en poder de este semanario, los trabajadores acusan ante el titular de la DJS que el dueño del frontón pretende disimular “o no hacer del conocimiento de las autoridades que la huelga persiste con la finalidad de engañar a los servidores públicos, obteniendo para su beneficio lo necesario para la reapertura del Frontón México evadiendo su responsabilidad laboral para nosotros los trabajadores que llevamos casi 20 años en paro, y desde entonces hemos sido olvidados e ignorados en nuestros derechos que nos asisten”. Sindicalismo charro El inmueble se encuentra en remodelación con el visto bueno de la CROC, a la que le corresponde velar y defender los derechos de los trabajadores y sus familias. Pese a ello, esta confederación ha permitido el acceso al lugar de trabajadores encargados del remozamiento. Las obras presentan un avance de 50%. El Frontón México, inaugurado en 1929, cerró sus puertas en 1996 porque se fueron a huelga 75 empleados, pertenecientes al Sindicato Progresista de Trabajadores de la Industria Turística, Gastronómica, Centros Deportivos y Sociales, Similares y Conexos de la República Mexicana. Pero ante sospechas de posibles conflictos de interés entre el sindicato y el patrón, 45 de los agraviados optaron por irse a las filas de la CROC en 2002. Con el transcurrir del tiempo y por diversas razones, los huelguistas se fueron apartando del movimiento. Sólo permanecieron 10 exempleados en pie de lucha. “Así se reconozca a un solo trabajador, la huelga está vigente, como lo confirma la JFCA”, sentencia el abogado Manuel Diego Sanciprián, uno de los defensores del grupo de huelguistas: “Es un derecho laboral que no prescribe. Por otra parte, el sindicato y el patrón manifiestan que la huelga ya está liquidada y que ellos ya no tienen nada que ver en el asunto. Pues bien, los invitamos a que demuestren cómo fue que se finiquitó la huelga sin el consentimiento de los trabajadores, quienes no han recibido ninguna propuesta ni cantidad alguna de dinero.” En entrevista, Sanciprián, maestro en derecho, ironiza: “Y resulta que la JFCA, que es la autoridad competente, no tiene conocimiento de la terminación de la huelga, como lo manifiestan ellos. Por esa razón deberán exhibir los documentales que acrediten tales dichos”. El abogado abunda sobre la inactividad del sindicato en defensa de sus afiliados. “Resulta que ahora contesta, pero a solicitud de la JFCA; no le quedaba de otra. El sindicato responde porque se le apercibe y se le advierte también de la sanción a la que puede hacerse merecedor. De igual forma se le recuerda que tiene la responsabilidad de representar a los trabajadores”. –¿El sindicato ha sido omiso con sus agremiados? –se le pregunta. –Pues dejó de actuar por décadas en defensa de sus trabajadores, como obra en los expedientes radicados en la JFCA. Esperamos que esto llegue a buen fin. Los trabajadores se están quejando con derecho y porque les asiste la verdad. Acudiremos a las instancias correspondientes para frenar esta flagrante violación a los derechos de los trabajadores, confiando en el sistema legal y jurídico que impera en nuestro país, porque la justicia existe. “Tal parece que el sindicato de los trabajados no existe. Por los medios de comunicación y por versiones de los encargados de las obras a los afectados, sabemos que planean abrir el Frontón México. Están actuando como si la huelga ya hubiese terminado. Sin embargo, para el expediente que obra en la JFCA no hay ninguna constancia que así lo acredite.” El litigante revela que en vano han intentado acercarse con la CROC. “Sólo una vez nos atendieron, dejamos números de teléfonos, contactos y seguimos sin respuestas. No hay acercamiento ni intención alguna de platicar con los empleados. Hemos tratado de tocar puertas con la idea de que les ofrezcan algún tipo de arreglo a los trabajadores, pero tal parece que la intención es ignorarlos, no llegar a ningún acuerdo”.

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