Operación Sonora, otro "remedio" para el basquetbol mexicano

domingo, 7 de abril de 2019 · 09:56
El desorden se combate con el desorden… Así parece al menos en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, que encabeza Ana Gabriela Guevara, y en la Federación Internacional de Baloncesto, entidades que torcieron el reglamento de la organización que rige el basquetbol mexicano para que lo encabece la empresaria sonorense Xóchitl Lagarda Burton, cuyo objetivo es mejorar las finanzas de la asociación. De acuerdo con testimonios, el proceso de designación incluyó la firma de documentos en blanco sobre la intención de voto. CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- En un intento más para ordenar la Asociación Deportiva Mexicana de Baloncesto (Ademeba), Xóchitl Lagarda Burton fue elegida el sábado 23 como dirigente de este deporte. Sin embargo, el proceso de su designación está plagado de irregularidades.  Cercana a la directora de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) –Ana Gabriela Guevara–, la empresaria sonorense encabezó la única plantilla, que fue conformada en cuestión de minutos y registrada el mismo día del proceso electoral, cuando debió ocurrir 24 horas antes, como establece el procedimiento para renovar al presidente, al Consejo Directivo y a los órganos de gobierno.  Con el tiempo encima, integrantes de algunas asociaciones estatales de la Ademeba cabildearon con los opositores a la candidata y los convencieron de votar por la planilla de unidad de Lagarda, quien sólo se presentó ante los afiliados cuando estaba por comenzar la asamblea extraordinaria en la que fue elegida por unanimidad tras una elección planchada. Detrás del proceso electoral estuvo la Federación Internacional de Baloncesto (Fiba Mundo) y la Conade, entidades deportivas que operaron para conseguir que los presidentes de las 32 asociaciones estatales y de las instituciones afiliadas (IPN, UNAM e IMSS) firmaran una hoja con la intención de su voto, pero que tenía en blanco el nombre del presidente a elegir.  El proceso para renovar la dirigencia se inició el 5 de marzo último, cuando el gerente general de la Ademeba, José Reyes Ronfini, envió la convocatoria a los afiliados para la Asamblea General Extraordinaria que se realizaría el 23 de marzo en el hotel Sevilla Palace de la Ciudad de México.  En el documento, del cual Proceso tiene una copia, Reyes escribió que, además de elegir al nuevo presidente y al Consejo Directivo, se votarían los nuevos estatutos que la Fiba Mundo ya había aprobado. Lo anterior, para dar seguimiento a la decisión del 8 de diciembre de 2018 del Buró Central del organismo internacional. En el escrito agrega que también busca que participen todos los asociados, sobre todo los que fueron excluidos por Gilberto Hernández Oseguera, expresidente de la Ademeba, quien dejó el cargo empujado por la propia Fiba Mundo.  Sin embargo, el 3 de febrero, en una asamblea de “carácter informativo”, los asociados se reunieron en Hermosillo, Sonora, para definir los términos de la convocatoria.  Desde entonces surgió el nombre de Cristóbal Lito Vargas, presidente de la asociación estatal de Sonora, como candidato a la presidencia del máximo organismo del basquetbol nacional.  El diario ESTO publicó el sábado 16 una entrevista en la que José Reyes Ronfini reconoció que nadie se había registrado formalmente como candidato ni había ninguna planilla, pero que la fecha límite para hacerlo era el 21 de marzo.  El miércoles 20, el propio Reyes Ronfini envió a los afiliados vía correo electrónico el procedimiento para elegir al presidente, al Consejo Directivo y a los órganos de gobierno.  En el documento se establece que la votación se realizará el sábado 23 a las 16:00 horas, y en el apartado de requisitos de elegibilidad se estipula que “los candidatos a los cargos enlistados deberán formalizar su pretensión a la Comisión Electoral con por lo menos 24 horas de anticipación a la fecha y hora de la elección que se llevará a cabo durante la asamblea”. Pero no ocurrió así.  A 24 horas de la asamblea aún no estaba definido el o los candidatos; algunos presidentes se rehusaron a firmar el documento en blanco, pese a que Modesto Robles, nombrado vicepresidente de la Ademeba, operó el envío de las cartas y la obtención de rúbricas para intentar demostrar la intención de votos.  Los llamados disidentes eran el grupo integrado por los presidentes de las asociaciones de baloncesto de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Durango, Guanajuato y Aguascalientes.  En la mañana del sábado 23, en el hotel Hyatt de Polanco, los presidentes que estaban en favor de la planilla de unidad confrontaron a los opositores. Uno a uno le explicaron por qué era importante contar con su voto.  Hasta ese momento supieron que no se trataba de un candidato, sino de la empresaria sonorense Xóchitl Lagarda, vicepresidenta nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y directora general de la Universidad LiberQuaré. “Es candidata de la Conade” Quienes se opusieron a la designación de la sonorense explicaron que ella no forma parte de la familia del basquetbol ni tiene experiencia en este deporte. Otros asociados, como los de Tamaulipas, Querétaro y Yucatán, destacaron la necesidad de contar con una persona capacitada para administrar y ordenar las finanzas en la Ademeba.  Después de horas de jaloneos la disidencia aceptó apoyar la única planilla y quedó conformada así: Xóchitl Lagarda, presidenta; Modesto Robledo, vicepresidente; René Cortez, tesorero, y Carlos Hernández, José Luis Baños, Olivia Carrillo, Manuel Sáenz, Jorge Medina, Mario Méndez y José Luis Gallegos, vocales.  Entre los argumentos con los que fueron convencidos los opositores destaca el que Lagarda “es la candidata” de Ana Gabriela Guevara. Al menos eso les dijo José Luis Sáez. No obstante, la nueva presidenta niega cualquier amistad con la titular de la Conade y asegura que sólo la conoce como a cualquier otro sonorense.  “Que al haber sido presentada en tiempo y forma la postulación de la planilla denominada ‘Baloncesto por México’, en este acto se autoriza y se proclama como válida dicha planilla, misma que presentó físicamente 28 avales (las cartas que fueron firmadas en blanco) de las asociaciones estatales e instituciones afiliadas con derecho a voto”, dice el documento que firmaron dos de los integrantes del Comité Electoral: José Luis Sáez, en representación de la Fiba Mundo, y el notario coahuilense José Luis Treviño.  Puesta en escena De inmediato, todos se trasladaron a las instalaciones del hotel Sevilla Palace, ubicado en Paseo de la Reforma, donde ya todo estaba puesto en un salón para realizar la votación en la asamblea como un mero trámite.  Por decisión unánime, en cuestión de minutos, Xóchitl Lagarda, acompañada por la directora de la Conade, Ana Gabriela Guevara, se convirtió en la responsable de guiar el destino del basquetbol mexicano hasta después de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.  “El resultado de la votación fue unánime. Fue una decisión por aclamación, todos estuvieron de acuerdo. La votación fue abierta y todos levantaron la mano. Estuvo presente Ana Guevara y eso les dio confianza. Asistió la Fiba Mundo (representada por Saez), el líder de la Fiba Américas, Carlos Alves, y eso les dio certidumbre a los asociados de que van a ser escuchados y de que recibirán los apoyos internacionales que lleguen.  “Después tuvimos un taller de planeación en el que quedaron plasmados sus intereses e intenciones, tendrán participación activa y voz en la reestructuración de la Ademeba”, dice Lagarda. –Antes de la asamblea los presidentes recibieron cartas en blanco para que dieran, sin saber quién sería el candidato, su intención de voto. ¿Qué opina de esto?  –No tengo conocimiento de eso.  –¿Cuándo presentó la planilla? –Dentro de los tiempos marcados. El 23 de marzo temprano. –¿El mismo día de la asamblea? –No, había una fecha límite. El viernes 22. Dentro de los tiempos estipulados por la Fiba Mundo. Hubo un Comité Electoral y ellos fueron los responsables. Yo, como postulante, no estuve involucrada, pero siempre seré respetuosa de la parte institucional.  –¿Le llamó la atención que fuera por unanimidad y que la elección fuera tan tersa? Usted es la primera mujer en dirigir el basquetbol nacional. –Veo que todos estamos siendo conscien­tes de que las cosas están cambiando, de que la participación de la mujer es una realidad y de que ellos quieren certidumbre, orden y trabajar. Pienso que todos están preparados para el cambio. Más que el camino terso, es el deseo de cambio. Y están los deseos de un baloncesto unido.  “Es preocupante el estado de las canchas del país, no hay profesores, en las ligas municipales no hay entrenadores profesionalizados, que trabajan por pasión pero no tienen la preparación. Hay que atender eso y más.” –¿Cómo se convirtió en candidata?  –Varios de los representantes de asociaciones estatales son los que me proponen. Yo tengo años participando con el sector empresarial y articulando­ mesas donde estuvimos buscando la participación del sector privado para profesionalizar el deporte. Si tenemos orden, estructura y organización, la iniciativa privada nos ayudará. Desde hace años he sido cercana al Comité Olímpico Mexicano.  De acuerdo con Xóchitl Lagarda, la Fiba Mundo le dio un plazo para regularizar financiera y administrativamente a la Ademeba, solicitó un proyecto deportivo de trabajo y que haya profesionalización para el desarrollo del basquetbol mexicano. Si esto no ocurre, no podrá considerar al organismo como su afiliado.  Según sus cálculos, le tomará un mes tener acceso a los estados financieros que hasta el miércoles 28 no había recibido. Adelantó que denunciará cualquier irregularidad económica que encuentre, sin importar si son recursos públicos o privados.  “Para tener una asociación sana debemos volverla sustentable, que genere sus propios recursos. Los empresarios invierten cuando saben que su dinero está bien usado. Esa será mi gran aportación, además de la visión social en este deporte”, añade.  Pugna de años La Fiba Mundo y la Conade han tenido las manos metidas en los procesos de elecciones de la Ademeba desde abril de 2016, cuando se creó la Comisión para el Fortalecimiento del Basquetbol (Task Force) en Mies, Suiza. La Fiba Mundo eligió al español José Luis Sáez para que la representara; por el COM participó Antonio Murrieta; por la Ademeba, Modesto Robledo, y por la Conade, Gilberto Hernández Oseguera, abogado del deporte y juez del Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS), cercano colaborador del exdirector de la Conade Jesús Mena y luego de Alfredo Castillo.  Pero el orden y la armonía no llegaron al basquetbol mexicano ni se puso fin a dos décadas de conflictos administrativos en este deporte. El 11 de diciembre de 2016 los presidentes de las asociaciones estatales consensuaron que el empresario regiomontano Carlos Bremer, de Grupo Financiero Valúe, cubría el perfil para dirigir la Ademeba y votaron por él.  Acordaron renovar todo el Consejo Directivo y poner a Bremer como su líder. Pero Hernández Oseguera los madrugó a todos. En una clara violación a la votación de los afiliados se autoimpuso como presidente de la Ademaba, de facto se apoderó del organismo, nombró como gerente general a José Reyes Ronfini y dispuso del presupuesto que le otorgó la Conade.  Entre sus decisiones más cuestionadas está la de instalar las oficinas de la Ademeba en las de la NBA México; es decir, ambos organismos comparten el mismo espacio en el edificio de Paseo de la Reforma 1236, en Lomas de Santa Fe.  El abogado Hernández Oseguera creó unos nuevos estatutos que la propia Fiba Mundo rechazó porque le quitaba a varios afiliados su derecho al voto. Sin haber renunciado al cargo en el que se autoimpuso, Hernández Oseguera se convirtió al mismo tiempo en secretario general de la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut), cuando Yon de Luisa se convirtió en presidente de ésta en julio de 2018.  El abogado pretendía mantenerse en los dos cargos, pese a que está impedido para hacerlo. Sin embargo, el presidente de la Fiba Mundo, el argentino Horacio Muratore, lo presionó para que renunciara. Cuando así ocurrió en el último trimestre del año, la Ademeba quedó en manos de Reyes Ronfini, quien operó como gerente y como presidente. Ambos personajes dejaron a ese organismo deportivo en el limbo. En la asamblea del sábado 23 también se aprobaron en lo general los nuevos estatutos de la Ademeba, dejando pendiente su revisión y la votación de algunos artículos en lo particular. El viernes 15, Hernández Oseguera renunció como secretario general de la Femexfut. Este reportaje se publicó el 31 de marzo de 2019 en la edición 2213 de la revista Proceso

Comentarios