CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El archivo documental bibliográfico de Octavio Paz, Nobel de Literatura 1990, sí será monumento artístico y el primero de su tipo, informó el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). A través de un comunicado, el instituto confirmó que la Secretaría de Cultura expedirá esa declaratoria con fundamento en la Ley sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, tras un voto unánime de la Comisión Nacional de Zonas y Monumentos Artísticos (CNZMA). La comisión está integrada por Lidia Camacho, directora general del INBA, en su calidad de presidenta de esa instancia; Gabriel Mérigo Basurto, representante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Louise Noelle Gras y Xavier Cortés Rocha, investigadora del Instituto de Investigaciones Estéticas y maestro emérito de la UNAM, respectivamente, y el doctor Bernardo Gómez Pimienta, director de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Anáhuac. “Para llegar a esa decisión, los integrantes de la CNZMA tomaron en cuenta la importancia intelectual de Octavio Paz, Premio Nobel de Literatura mexicano, cuyo pensamiento crítico y fuerza expresiva fue patente en todos los géneros que ejerció: la poesía, el ensayo y la traducción, así como editor de publicaciones que forjaron intelectualmente a varias generaciones”. También destacaron que Paz “abrió nuevos caminos a la expresión literaria y a la reflexión sobre literatura, artes plásticas, arquitectura y política, lo que influyó de manera determinante en el pensamiento contemporáneo sobre esos y otros muy diversos campos.” Para la declaratoria, el CNZMA también tomó en cuenta las argumentaciones de especialistas como Geney Beltrán Félix, coordinador nacional de Literatura del INBA; la escritora y miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, Silvia Molina; Javier Garciadiego, miembro de El Colegio Nacional, así como de Xavier Guzmán Urbiola, subdirector general de Patrimonio Artístico Inmueble del INBA. El martes 7, María Cristina García Cepeda, titular de la Secretaría de Cultura, fue entrevistada al finalizar la inauguración de una exposición en el Museo Nacional de Antropología, y ahí afirmó que el legado de Octavio Paz y su esposa Marie Jo permanecería en el país, y que su aseveración estaba basada en una precisión notarial que el autor de El laberinto de la soledad (1950) había dejado en su testamento. Las preocupaciones sobre el legado de Paz iniciaron tras el deceso de Marie José, su viuda, el pasado 26 de julio, al no existir un heredero, y que por tanto el legado del Nobel podría quedar intestado.